Colmillos, colmillos, colmillos
Quizás no era normal, quizás no era saludable. Roger era plenamente consciente de ello, pero no podía dejar de pensar en ello.
Brian tenía una dentadura muy bonita. Más concretamente, tenía un bonito par de colmillos bastante afilados que hacían que el rubio se olvidara de todo lo sensato cuando el hombre de pelo rizado sonreía. Todo blanco, afilado y seductor.
Ah, y Roger estaba dispuesto a dar su riñón izquierdo para sentir esos colmillos hundirse en su piel, para experimentar el dolor agudo y punzante mientras esos dientes lo marcaban por todas partes, asegurándose de que todos supieran a quién pertenecía.
Morder, morder, morder
El rubio sintió que el calor se acumulaba en su estómago mientras veía a Brian sonreírle a otro entrevistador, con los labios curvados hacia arriba y revelando esas pequeñas cosas puntiagudas. Roger tragó saliva involuntariamente, incapaz de apartar la mirada.
Malditos colmillos
No tenía ninguna afición por la mordedura. No la tenía. Tampoco le gustaban los vampiros.
Realmente, realmente quería que Brian lo mordiera. Mucho. Muchas veces. No había ninguna torcedura allí, solo una necesidad muy profunda de ser mordido. Con esos colmillos. Y la necesidad no disminuyó realmente cuando vio que los ojos color avellana se movían del entrevistador para encontrarse con su mirada febril.
Morder, morder, morder
La entrevista fue dolorosamente lenta y larga, y al final Roger se mostró dolorosamente duro y evitó por todos los medios el contacto visual con Brian. Sabía que el guitarrista era consciente de su actitud evasiva, y por un momento terrible temió que Brian tuviera una corazonada de los pensamientos menos que santos de Roger, porque el hombre mayor estaba sonriendo con sorna, mostrando sus afilados dientes.
Colmillos, colmillos, colmillos, ¿puedes morderme de una vez?
¿Estás bien, amigo?" Y de repente esos dientes estaban muy cerca de él, mientras Brian le pasaba el brazo por la cintura y lo sacaba de la habitación. Una sonrisa juguetona se dibujaba en sus labios y Roger tenía un fuerte deseo de empujar los labios hacia arriba un poco, solo para ver los dientes un poco más.
"Oh, sí. Simplemente genial". Sería aún mejor si hundieras tus dientes en mi cuello, me tiraras del pelo y me convirtieras en tu puta.
"Algunas preguntas muy interesantes que tenía el entrevistador"
"Sí. Muy profundo y esas cosas".
"¡Exactamente! Creo que finalmente estamos empezando a transmitir lo que queremos, ¡como si la prensa realmente estuviera empezando a tomarnos en serio! No me refiero a la mierda que publica The Sun, pero..."
Uhhuh, sí, claro. ¿Ahora te callarás y me morderás?
Roger no se dio cuenta de que lo había estado mirando hasta que Brian dejó de hablar y miró a el rubio con una expresión ilegible.
"¿Hay algo en mis dientes o por qué me miras?"
"Colmillos"
"¿Qué?"
"Tienes colmillos" El primer comentario había sido un desliz, este segundo no. El daño ya estaba hecho, ahora era el momento de intentar sacarle el máximo partido.
"Hm, sí. Estoy al tanto"
"Realmente necesito que me muerdas" Hubo un ligero ceño fruncido en el rostro de Brian, antes de que sus rasgos se derritieran en una sonrisa diabólica.
Colmillos, colmillos, colmillos
"Está bien"
Y quince minutos después, Roger se aferraba a Brian con todas sus fuerzas, con las piernas desnudas alrededor de la cintura del guitarrista, mientras el hombre mayor lo follaba contra la pared de un armario destartalado, el rubio supo que nunca volvería a poder mirar a Brian de la misma manera. Sintió los colmillos hundirse en su hombro y cuello, una y otra vez, provocando dolor y haciendo sangrar.
Morder, morder, morder
Roger nunca había corrido con tanta fuerza en su vida, y sabía que todos sabrían qué había estado haciendo y con quién.
Porque Brian realmente tenía una bonita dentadura y un hermoso par de colmillos que dejaban una marca inconfundible
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Una pequeña traducción, porque estoy aburrida y estoy en la escuela.😭
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Morder, Morder, Morder
FanfictionA Roger no le gustan los pequeños colmillos de Brian. Él no lo hace.