La brisa suave del río acariciaba el rostro de SeokJin mientras se inclinaba sobre la corriente, sumergiendo con cuidado el hanbok en el agua clara. El regalo que había recibido de su admirador secreto era precioso, más valioso de lo que cualquiera pudiera imaginar. A pesar de las manchas de lodo y excremento de caballo que las envidiosas omegas le habían lanzado en un acto cruel, SeokJin se negaba a rendirse. El hanbok representaba algo más: un gesto de admiración, de respeto, algo que él no había conocido antes.
Sumergió la tela nuevamente en el río, frotando suavemente con sus manos, esperando que el agua hiciera su magia. A pesar de su determinación, SeokJin no pudo evitar sentirse un poco derrotado. Las manchas parecían difíciles de quitar, y por más que se esforzara, el esplendor del hanbok seguía opacado por la suciedad.
Justo en ese momento, una figura apareció en su visión periférica, de pie en la orilla del río. SeokJin levantó la vista, sorprendido, y vio a un hombre cubierto por un hanbok oscuro, su rostro oculto bajo el borde de su sombrero. A simple vista parecía un noble, pero había algo en él que desprendía una presencia autoritaria.
— Ese hanbok no merece estar en el agua del río.— dijo el hombre con una voz profunda y serena. —Déjamelo a mí. Conozco a alguien que puede hacerlo lucir como nuevo.— SeokJin frunció el ceño, inseguro de si debía confiar en un desconocido que hablaba con tanta familiaridad. Lentamente, se levantó, sacando el hanbok mojado del río. Las gotas de agua caían pesadamente de la tela, y en ese momento, lo último que SeokJin esperaba era encontrarse con alguien.
— No es necesario. Estoy seguro de que puedo limpiarlo.— respondió SeokJin con una mezcla de orgullo y cautela, sosteniendo el hanbok con ambas manos. El hombre dio un paso adelante, su voz más suave pero igualmente firme.
— No es una broma. Sé lo que ese hanbok significa para ti, y no debería ser tratado como algo ordinario.— SeokJin sintió una punzada de confusión. ¿Cómo sabía ese hombre lo que el hanbok representaba para él? ¿Podría ser...? No, era imposible que este desconocido fuera su admirador secreto. Y sin embargo, algo en su tono le decía que lo sabía todo.
— ¿Quién eres tú?— SeokJin preguntó, desconcertado. El hombre esbozó una leve sonrisa, aunque su rostro seguía en gran parte oculto.
— Alguien que quiere verte usar ese hanbok con orgullo, no manchado por las maldades de otros. Si me lo permites, te lo devolveré en mejores condiciones de las que has visto.— La sinceridad en sus palabras tocó algo en el corazón de SeokJin, aunque su mente aún estaba llena de preguntas. Finalmente, después de un momento de duda, SeokJin extendió el hanbok al desconocido.
— De acuerdo, pero... ¿cómo sé que no es otra broma? Los otros siempre... siempre encuentran formas de hacerme quedar en ridículo.— El hombre tomó el hanbok con una delicadeza sorprendente, casi reverente, y lo guardó cuidadosamente.
— No soy como ellos. Pronto lo sabrás. Confía en mí esta vez, y te aseguro que no te arrepentirás.— SeokJin lo observó irse, aún desconcertado por el encuentro. Algo en su pecho se agitaba, una mezcla de confusión, esperanza y una ligera sospecha. Mientras el hombre desaparecía entre los árboles, SeokJin no pudo evitar preguntarse quién era ese hombre que parecía conocerlo tan bien, y cómo era posible que alguien tratara su hanbok, y por ende a él, con tanto respeto.
. . .
SeokJin estaba terminando de doblar la ropa que había lavado junto al río cuando un leve golpe en la puerta interrumpió su concentración. Al abrir, se encontró con un paquete cuidadosamente envuelto en tela fina. Frunció el ceño, sorprendido. No había esperado recibir nada más, especialmente después de haber devuelto el hanbok anterior en perfectas condiciones tras la ayuda de su misterioso benefactor.
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The Min Empire | YoonJin
Fiksi Penggemar𓍢ִ໋🌷͙֒ Min YoonGi es el príncipe heredero del imperio Min era conocido por ser cruel y despiadado con todos pero es detenido por su reciente enamoramiento de un plebeyo cualquiera como dicen los nobles, muchos no veían el gran valor de seokjin. ...