Algo Contigo // Segunda Parte // Meddison

Golpes y Recaídas

Narra Meredith

Bailey empezó a jugar como todo un profesional, no sabía que tenía tanta fuerza en los brazos para batear así. Soy una madre muy orgullosa en éste momento.

- ¡¡Eso es!! ¡¡Ese es mi niño!! - grité, dando brincos y abrazando a Zola para festejar ese increíble lanzamiento.

- ¡¡Es un hole rome!! - chilló Addison, llena de entusiasmo.

- Home Run, cariño ¡Pero sí! ¡Es increíble! - dije, abrazándola y saltando con ella, aún me parece adorable su falta de conocimiento en los deportes.

- ¡¡Corre Bailey!! ¡¡Corre!! - gritó Emily, dejando su garganta en aquella celebración de victoria.

- ¡¡Lo logró!! ¡¡Eso es, mi amor!! - grité, subiéndome a la espalda de Addison.

- ¡Mer! Avisame la próxima vez que hagas eso - se quejó, sujetandome para no dejarme caer.

Besé su mejilla y me aferré para no soltarme, hace mucho que no nos emocionábamos tanto por algo así. Todos los compañeros de Bailey corrieron a abrazarlo y a levantarlo del suelo en señal de triunfo, estaba esbozando pura felicidad.

En medio de la emoción, algo raro pasó, Bailey se cayó de las manos de sus compañeros y todos empezaron a rodearlo, los entrenadores se acercaron y se veían muy aturdidos.

- ¿Qué está pasando? - pregunté, bajandome de la espalda de Addison.

- Creo que se golpeó, tenemos que bajar - dijo Addie, corriendo gradas abajo a toda velocidad.

Amelia, Mark y Lexie acababan de llegar, terminando su turno y les tocó ver aquel semejante escándalo. Bajé junto con mi esposa y los demás nos siguieron, teníamos que saber qué estaba ocurriendo.

- Con permiso, soy su madre, soy médica - dijo Addie, apartando a todo el mundo para poder revisar a nuestro niño que estaba tumbado en el césped.

- Creo que está roto - se quejó Bailey, mostrándonos su brazo completamente deformado e inflamado.

- Parece ser una fractura compuesta, tenemos que llevarlo al hospital - dijo, observando el golpe con mucho cuidado de no provocarle más dolor.

- Deja que lo cargue, no te preocupes amiguito, te vas a poner bien - dijo Mark, sujetándolo en sus brazos para llevarlo lejos de allí.

- Pero mamá, quiero salir en la foto con el trofeo y el equipo - pidió Bailey, con sus ojitos empañados de lágrimas.

- Mi amor, ésto es más importante ¿Sí? Tu brazo está roto - dijo Addie, corriendo al lado de Mark sin perderle ni una sola pisada a pesar de esos finos e incómodos tacones altos.

- ¿Quieren que llame a pediatría? - preguntó Catherine, chocando conmigo y uniéndose a la conmosión.

- Claro, seguro te mueres por ayudarnos - dije sarcásticamente, haciéndola a un lado para pasar.

- Meredith, por dios, no me importan los conflictos que haya entre nosotras, jamás me metería con unos niños, ellos son los únicos inocentes aquí - dijo ella, ofreciendo una especie de tregua, eso es nuevo para mí.

- Bien, llama a pediatría y pide que tengan lista la máquina de radiografías, iré por mis hijas - la rodeé y me apresuré a buscar a las niñas, que aún estaban al cuidado de Richard en los asientos.

- Pequeñas, vámonos, estamos llevando a su hermano al hospital - dije, alzando a Ellis y tomando la mano de Zola para correr.

- Mamá, el abuelo le gritó a Ellis mientras ustedes revisaban a Bailey - dijo Emily, mirando a Richard con enojo.