•Sharks And Lollipops• [Ellen Joe x Lector]

05| Un demonio nunca deja de ser uno.

La puerta de mi vieja casa se abre de golpe, los muebles viejos y desgastados son lo único que me reciben. Inhalo sintiendo el aroma de mi hogar. Dejo descansar mis cosas en la mesa mientras me dirijo a la cocina a prepararme cualquier cosa con tal de saciar mi hambre.

ㅡHogar dulce hogar, este lugar se pondrá de lujo ahora que tengo un trabajo oficial.

El pequeño Bangbú siendo mi única compañía se acerca y se sienta a mi lado. Al principio se mostró confuso ante la idea de dejar aquella vida corrupta, pero no tardó en respetar mi desición con tal de seguirme a cualquier lado.

ㅡUn trabajo que me hace ver genial... Un equipo con personas muy agradables y una linda sirvienta de compañera, nada más podría faltar.

Hablo con la boca llena de aquel sándwich improvisado que solo contenía jamón.

Aún así... ¿Un demonio es capaz de limpiar la sangre de sus manos tan fácilmente?

Ya al día siguiente, mis pies me llevaban en dirección al encuentro de mi nueva misión. Era una tarde cálida, mis manos trabajaban para arreglar mi uniforme mientras usaba el reflejo del cristal de algunos establecimientos. Antes, entrando a la cavidad usando ropas sucias y rotas junto con un gran e incómodo casco para cubrir mi identidad, ahora, usando un traje muy elegante que refleja disciplina y sin la necesidad de ocultar mi rostro.

A lo lejos ya podía avistar a Ellen en la entrada de la cavidad esperándome, ella estaba mirando su celular perezosamente sentada en unas cajas.

ㅡBuen día, bella dama ㅡDigo con un tono educado para demostrar mi aprendizaje por su tutoría, aunque ella solo me vió raro por el gesto.

ㅡComo sea... Empecemos con esto ㅡElla guarda su celular y se levanta para luego entregarme algo ㅡTen, el jefe me pidió que te trajera esto. Tiramos aquella espada vieja que llevaste para pelear contra nosotros. Usa algo que sí sirva.

Ella me entrega una pequeña pero bien hecha espada. La hoja era de color negro y el filo de un tono más claro.

ㅡSiendo un experto en armas supongo que será fácil que te adaptes a ella ㅡDice ella en un tono desinteresado.

Y efectivamente, mi mano blande la espada de un lado a otro para adaptarme a su peso y balance. Hecho eso, nos adentramos a la cavidad.

ㅡ¿Qué esa cosa que tiene? ㅡLe indico a un extraño aparato que trae la espada.

ㅡUn amplificador modificado... ¿Nunca habías usado uno? Ayuda con el desempeño del arma... ¿Qué has estado usando para matar gente todo este tiempo?

ㅡCualquier cosa que me consigo. Hasta una pelota de béisbol puede ser un arma letal si la lanzas con la suficiente fuerza... Pero bueno, ¿Que es lo que exactamente hace el amplificador?

Ella parecía ir a explicarme pero la espada se enciende en llamas, la hoja brilla de un color rojizo por el calor al rojo vivo.

ㅡ... Exactamente eso.

Excelente...

ㅡUna pregunta, si supuestamente eres un semi-humano, ¿Como es que no tienes alguna característica de animal? ㅡPregunta ella elevando un poco su interés.

ㅡAh... Pues mi papá era un semi-humano y mi madre si era una humana normal... Así que mi genética es mayormente de un humano. Mis cualidades serían mis capacidades físicas superiores.

ㅡBueno...

Ella bosteza, ya perdí la cuenta de cuántas veces lo habrá hecho. Ella mantiene sus brazos a su espalda mientras sujeta sus tijeras, sus tacones hacían ruido cuando tocaba el suelo, su lindo vestido de sirvienta que se aferraba a su curvas...