Un nuevo hechicero en la Era Meijin

Duodécima parte: Despedida

Durante los días siguientes fueron tranquilos, pero algo que me preocupaba había llegado, la misión donde suguru iba a conocer sus futuras hijas, decidí acompañarle, fuimos hablando sobre su técnica y lo que el podía hacer, también hablamos de como estaba Riko y su viaje por el mundo donde yo y Gojo le habíamos pagado todo, y sobre la misión de Nanami y Haibara, la cual dejo a los dos muy heridos pero habían logrado ganar, Gracias a que los dos habían mejorado muchísimo en sus habilidades -"¿Así que hablaste con Yuki no?"- Geto me miro sorpresa y asintió -"¿Si, la conoces sensei?"- lo mire de reojo -"No, pero se quien es, no creo que podamos ser amigos, somo personas muy diferentes"- Este volvió asentir y hablo -"Estuvimos hablando sobre como desasearnos de las maldiciones, hablamos de varios métodos pero..."- suspire y aparco el coche afuera de la carretera y salgo del coche -"vamos seguir caminando quiero hablar mas contigo"- este salió del coche y seguimos caminando -"Suguru hay algo que no le conté a nadie, pero.. yo no soy un humano, no del todo, mi madre era una persona que era capaz de tener hijos de maldiciones y de mis diez hermanos yo fue el único que nació.. pero desde que nací estuve rodeado por personas, que tenían sueños y deseos.. es verdad que los humanos son horribles y que defenderlos es una mierda, pero a veces, solo a veces me siento feliz de ayudarlos."- sonreí levemente y miro al frente -"Suguru no digo que los salves siempre, también quiero que vosotros seáis felices, pero te pido que veas como es el mundo real.. el mundo tiene una extraña forma de equilibrarse, si todos los humanos mueren claro las maldiciones también lo iban hacer pero el mundo no se iba a mantener así.. talvez las maldiciones nacerían de nosotros o talvez algo mucho peor pasaría"- Geto me miro sorprendido por lo que dije y yo me detuve y le sonreí -"Pero te prometo Suguru que algún día el mundo reconocerá nuestros esfuerzos y ellos lucharan por si mismos para defenderse, ese es mi sueño, que todos puedan defenderse y no dependan de ninguno de nosotros. Para que todos los jóvenes hechiceros puedan vivir tranquilos"-

llegamos a la ciudad y solo para mantener la cronología actualmente es el año 2009, donde talvez Suguru podría romperse o rendirse con los humanos, pero no quería eso.. no, el era mi amigo, mi alumno y mas importante, el era mi familia. Al llegar y entrar en la casa Yo y Geto vimos aquello, dos pequeñas niñas enjauladas como animales, mi mirada era oscura y la de Geto era aun peor, Aun que Geto no había pasado lo mismo que en la historia original esto solo fue la gota que rompió el baso, todo había venido de antes, geto había presenciado mucha muerte de compañeros, como los peces gordos del mundo jujutsu solo ordenaba y no decían nada, suspire y Geto hablo -"¿Que es esto?"- el se golpeo un poco la frente con su dedo y el hombre detrás de nosotros hablo -"¿Que es esto? ¡Ellas son las culpables de las desapariciones es series!"- Geto hablo en un tono mas serio -"no"- y el hombre siguió -"Estas dos están por ahí atacando a la gente del pueblo con poderes extraños"- y geto volvió hablar pero parecía que su voz no era escuchada -"Yo ya he eliminado al culpable de todo."- y la mujer del lado con veneno en su voz -"Estas dos también mataron a mi nieto"-

y de la nada una de las niñas hablo con una voz tan rota y desesperada que había escuchado en mi vida, llena de miedo -"No, eso no es-"- pero ni siquiera pudo terminar de hablar ya que la mujer y el hombre hablaron

-"¡Cállense, monstruo!"-

-"Su padre era igual!"-

-"Teníamos que haberlas matado cuando todavía eran bebes"- vi como geto levanto su mano y su dedo y salió una pequeña maldición de su dedo la cual dijo -"No.. se preocupen"- y estas se volvieron abrazar y este me miro, vi sus dudas, miedos, su ira por aquellas personas. ¿Qué debería hacer, decirle que esto esta mal? seria un hipócrita ya lo había echo y no sentía remordimiento, no quería mentirle no a Geto, bajo mi mirada por un momento, y luego la levanto con una sonrisa -"Señores, ¿podemos salir afuera un segundo?"- las dos personas me miraron confusas pero asintieron y empezaron a salir y yo mire a geto y lo abrace -"Esta será mi ultimo pedido como tu profesor.. sal de aquí con estas niñas, darles una vida mejor que esta.. y Suguru, porfavor no tengas miedo de pedir ayuda a tus amigos cuando lo necesites.."- me separo de el y sonreí y cuando iba saliendo me acorde del algo y lo miro -"Haibara tiene una cosa que es mía, un pequeño libro con algunas de mis técnicas y algunas instrucciones. Pero lo mas importante y dos cartas una para ti y otra para Gojo"- le sonreí y cerré las puertas.