The Walking Dead: El rey bandido

Capítulo 1

Capítulo 1

Los disparos, los gemidos y los gritos de agonía de las pobres almas que estaban siendo devoradas transformaron el supermercado en una escena de horror...

"¡Todos, evacuen el área!", gritó un policía mientras arrojaba a un caminante al suelo, justo antes de que pudiera devorar a una mujer, y le disparaba en la cabeza con su revólver.

Un policía inteligente y competente en una serie de zombis. Quizá los unicornios sí existan o Erick estaba alucinando.

El oficial siguió disparando hasta que su arma quedó vacía y buscó en sus bolsillos más munición.

"¡Tomen a sus familias y diríjanse al centro de refugiados!", gritó nuevamente el oficial. En lugar de recargar su arma, salvó a un anciano de un caminante que estaba a punto de hundirle los dientes en la cara.

El oficial y el caminante lucharon mientras el anciano abandonó a su salvador ante el peligro.

Erick observó cómo un segundo caminante atacaba al oficial, seguido por un tercero, que le hundía los dientes en la cara. Mientras los otros dos se devoraban su cuerpo, varias personas, incluidas algunas que el oficial acababa de salvar, no hicieron nada para ayudarlo y, en cambio, huyeron de la masacre.

Lección aprendida... No seas un héroe... Gracias, amable oficial...

Erick agarró el revólver del oficial, que se le había caído a los pies mientras el policía luchaba por su vida. Claro, el arma estaba vacía, pero eso no la hacía inútil...

[Felicitaciones... ¡Has conseguido tu primera arma de fuego!

Usted adquirió:

- Kit básico de armas de fuego.]

Erick lo abrió inmediatamente sin perder tiempo, necesitaba algo que pudiera usar para protegerse.

[Kit básico de armas de fuego... ¡Abierto!

Usted adquirió:

- Pistola de 9 mm

- Munición de pistola x10.]

La pistola apareció en una funda en su cinturón, y su peso hizo que Erick se sintiera mucho más seguro, aunque aún... no era suficiente.

Erick fue uno de los pocos que se quedó a saquear el supermercado en lugar de huir como los demás. Agarró un carrito de compras abandonado y corrió por la tienda, sin molestarse siquiera en buscar comida. Su mente estaba concentrada en encontrar armas cuerpo a cuerpo.

Cuando dos caminantes se cruzaron en su camino, Erick empujó el carrito de compras con todas sus fuerzas, aplastando a uno de ellos contra un estante y sujetándolo al suelo. Esquivó al segundo y lo golpeó con el revólver vacío antes de volver a correr...