Jisung nunca planeó quedar embarazado y mucho menos del jefe de la mafia más peligrosa del país Lee Minho. Ahora atrapado en un mundo de sombras y violencia Jisung no solo debe protegerse a sí mismo sino también al los bebés que lleva dentro. Mientr...
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Cuando Minho llegó a la casa recorrió las habitaciones en busca de Jisung hasta que lo encontró en el patio. Jisung reía animado, mientras conversaba con Jeongin, cuyo rostro se relajaba más de lo habitual.
Al notar la presencia del Enigma, Jeongin se tensó de inmediato con una inclinación rápida antes de apartarse.
Minho lo observó brevemente luego le indicó con un gesto que se marchara. Jeongin obedeció sin demora dejando a ambos solos.
— Veo que te estás llevando bien con él — comentó Minho mientras tomaba asiento frente a Jisung, su mirada calmada.
— Sí pasa todo el día conmigo lo mínimo es llevarnos bien ¿no crees? — dijo Jisung su tono despreocupado — ¿Te molesta eso? — preguntó entrelazando suavemente sus manos con las de Minho.
Minho sonrió levemente apretando las manos de Jisung en un gesto tranquilizador.
— Claro que no me molesta. A veces las mejores relaciones de lealtad comienzan con la amistad — dijo acariciando suavemente la mejilla de Jisung — ¿Cómo te has sentido? ¿Te han dado problemas este par hoy? — preguntó dirigiendo su mano al vientre de Jisung con un gesto protector.
Jisung sonrió colocando sus manos sobre las de Minho sintiendo el calor y la calma que le brindaba su toque.
— Al parecer decidieron darle un dia tranquilo a su madre —respondió con un brillo en los ojos.
El silencio entre ellos era cómodo pero había algo que inquietaba a Jisung, una pregunta que no podía seguir callando. Finalmente tomó aire y habló con seriedad.
—¿Puedo preguntarte algo? Pero necesito que me respondas con total sinceridad.
Minho lo miró directamente con su expresión mostrando que estaba listo para cualquier pregunta.
— Sabes que siempre te diré la verdad —contestó con seguridad.
Jisung bajó la mirada un segundo reuniendo valor antes de continuar.
— Si eso es así… dime ¿qué necesito hacer para que los demás no me vean como el omega que te engatusó? — preguntó con un nudo en la garganta. Había más miedo en su voz del que quería admitir.
Minho frunció el ceño tomando sus manos con más firmeza.
— No tienes que hacer nada. Lo que piensen los demás no debería importarte, lo único que importa es lo que tú y yo sabemos — le respondió Minho con sinceridad pero Jisung no parecía del todo convencido.
— Entiendo esa parte — dijo Jisung asintiendo ligeramente — Sé que todos hablarán por hablar, pero pensé que estaba bien, que todo iba tranquilo y hoy cuando apareció esa caja, me di cuenta de que hay un mundo ahí fuera que me está comiendo vivo solo por estar contigo.
Minho sintió una punzada en el pecho al escuchar el desánimo en la voz de Jisung. Sabía que este momento llegaría pero no esperaba que fuera tan pronto.
