Mini historias TomJake 🍉🍩

historia 2 🍩El Refugio en la Tormenta🍉

La lluvia golpeaba con fuerza las ventanas de la cabaña en el bosque, una melodía de gotas que acompañaba el rugido del viento. Dentro, el calor de la chimenea contrastaba con la frialdad de la noche, y la luz del fuego proyectaba sombras danzantes en las paredes de madera. Tom y Jake habían buscado refugio allí, lejos del bullicio de la ciudad, buscando un momento para ellos, un respiro del mundo.

Tom, sentado en el suelo junto a la chimenea, observaba las llamas con una expresión pensativa. Su cabello negro caía desordenado sobre su frente, y las cicatrices en su rostro y cuello parecían cobrar vida bajo el parpadeo del fuego. Jake se le acercó con dos tazas de té caliente, su cabello azul recogido en una coleta que aún goteaba por la reciente ducha. Se sentó a su lado, entregándole una de las tazas.

"Siempre me han gustado las tormentas", comentó Jake, tomando un sorbo. "Hay algo en ellas que me hace sentir... vivo, supongo". Tom sonrió levemente, girando la cabeza para mirarlo. "A mí me recuerdan a los días difíciles, cuando todo parecía ir mal. Pero... también a cuando te conocí", admitió, su voz apenas un susurro.

Jake se recostó contra él, apoyando su cabeza en el hombro de Tom. "Ese día llovía como hoy. Estabas en la estación de tren, empapado y temblando. Me acerqué porque pensé que necesitabas ayuda, y ahora... míranos", dijo con una risa suave, llena de nostalgia. Tom dejó escapar una risa también, recordando ese momento. "Nunca pensé que alguien con el cabello azul y una sonrisa tan brillante pudiera cambiarme la vida".

Se quedaron en silencio por unos instantes, disfrutando del calor y la cercanía. Jake alzó la mirada, observando las cicatrices de Tom, que siempre había mirado con cariño, no como marcas de sufrimiento, sino como huellas de supervivencia. "Nunca te lo he dicho, pero tus cicatrices... son hermosas para mí", dijo de repente, su voz sincera y suave.

Tom lo miró sorprendido, con un brillo de emoción en los ojos. "¿De verdad crees eso?", preguntó, como si quisiera asegurarse de que había escuchado bien. Jake asintió, tomando su rostro entre las manos, sintiendo la calidez de la piel de Tom bajo sus dedos. "Cada una de ellas es una historia de todo lo que has superado, y yo... yo te amo por lo que eres, con cada una de esas historias."

Una lágrima solitaria rodó por la mejilla de Tom, y antes de que pudiera caer, Jake la atrapó con un beso. Se miraron a los ojos, y en ese instante, la tormenta afuera dejó de importar. Los truenos y la lluvia se convirtieron en un telón de fondo para un amor que había encontrado su propio refugio.

Jake acercó su rostro al de Tom, y sus labios se encontraron en un beso profundo, lleno de la fuerza de mil tormentas, pero también de la paz que sólo se encuentra en el abrazo de quien amas. Cuando se separaron, Jake apoyó su frente contra la de Tom, cerrando los ojos y sonriendo.

"Sea lo que sea que venga, siempre encontraremos nuestro refugio... juntos", susurró Jake. Tom asintió, sintiendo que cada palabra se grababa en su corazón. "Contigo, las tormentas no me asustan más", respondió, rodeando a Jake con sus brazos y sintiendo cómo la calma de su amor le envolvía.

Y así, mientras la tormenta continuaba rugiendo afuera, Tom y Jake se quedaron abrazados junto al fuego, sabiendo que, pase lo que pase, siempre tendrían un lugar seguro en el corazón del otro.

                                                              FIN

//estoy llena de mucha inspiración, escribir esto casi me hace llorar//