Entrevista al Dragón Galés

I. Conociendo al periodista

La noche apenas comenzaba y la vida nocturna cobraba fuerza en aquella ciudad. Personas saliendo del trabajo, estudiantes que salían en grupos de amigos y parejas indiscretas entrando en hoteles de una sola noche.

El periodista George Spilberson miró los edificios que le rodeaban, asombrado de la vida nocturna floreciente en Japón. Por supuesto, siendo un periodista estadounidense y patriota hasta los huesos, nunca había salido del país.

Este era su primer trabajo fuera del país, y sin la financiación del Times. A pesar del duro golpe para sus ahorros y su billetera, no podía dejar pasar esta oportunidad que había estado buscando por 3 largos años.

Una primicia digna de la portada de la revista y una que pondría su nombre en la historia al ser el primer humano en revelar públicamente el mundo sobrenatural.

Corrió por las concurridas calles hasta llegar a un hotel cualquiera que pasaría desapercibido. Entrevistar a su objetivo, una de las figuras míticas más importantes en la historia de Gran Bretaña por su relación con las tierras y el propio mito Arturico.

Buscar al Emperador Dragón Rojo, Dragón Galés, Welsh Dragon o Sekiryuutei como lo llamaban en Japón fue una tarea ardua que le consumió una cantidad de gran cantidad de tiempo y recursos.

Entro al hotel y se dirigió al recepción, una joven que leía una revista, aparentemente sobre moda, le miro por encima de los lentes y alzó una ceja.

- Busco a Hyodou Issei- le dijo a la recepcionista en inglés.

- ¿Es... usted?- le preguntó tratando de encontrar las palabras correctas en inglés.

- George Spilberson, periodista americano. Quiero realizar una entrevista con su persona-

Ella le miro un rato tratando de procesar lo que dijo, sabía que la barrera del idioma sería un problema pero esperaba que no lo fuera durante la entrevista. Pasado un minuto, ella tomó su celular y se lo puso cerca.

- Repetir - miro la pantalla, Google Traductor. Suspiro.

- George Spilberson, periodista americano. Quiero realizar una entrevista con Hyodou Issei.

Al cabo de unos segundos, escucho su nombre y el del entrevistado provenir de la aplicación. Asintió con la cabeza y tomo la línea, miró una libreta y marcó el A108.

Intercambio unas palabras por la extensión telefónica. Unos segundos después colgó y le miro.

- Habitación A108, piso cuatro, puerta 8 izquierda-

George acepto la indicación un poco confundido. Miro el ascensor y fue hacia el, entró y presiono el botón del piso 4.

Minutos después, la puerta se abrió y miró un señor de apariencia escandinava con un monóculo sonreírme y entrar al ascensor, detrás de él una hermosa mujer albina que parecía sonrojada mirando hacia el piso.

- Disfruta de tu charla, joven Spilberson- le dijo el señor antes de que las puertas del ascensor se cerraran.

Miro devuelta al ascensor sorprendido, busco su libreta en el bolso que andaba. Ojeando entre páginas, encontró lo que buscaba "Padre del Todo, Odin Borson" y un pequeño garabato parecido a un stickman con barba larga y un ojo grande simulando un monóculo.

- ¿Acabo de ver a un dios Nórdico?- se preguntó sorprendido mientras volvía a su camino.

Busco la habitación A108, dudo un poco antes de golpear la puerta esperando una respuesta.

- Adelante- dijo una voz masculina en perfecto inglés americano.

Abrió la puerta y solo pudo ver una habitación medio amueblada, casi espartana en cuanto a decoración, para ser una figura mítica esperaba ver reliquias como Excalibur o el Santo Grial, incluso la lanza del soldado Longino. Pero en lugar de eso vio unos pocos muebles, sin plantas ni cuadros, incluso veía polvo en algunos de ellos.

- Eh...-

- Se que me buscabas, muchacho. Buscas una entrevista ¿No? Bien, dime tu primera pregunta- dijo la figura alta que miraba la ventana.

- Yo... -

- ¿Haras la entrevista sin grabaciones y sin notas?-

Salió de su impresión en un instante, inmediatamente puso su bolso sobre la mesa más cerca y sacó una grabadora, libreta y lápiz de grafito.

- Muy bien, empecemos. ¿Cuál es tu primera pregunta?- le preguntó el hombre sin voltear la mirada de la ventana.

- Tengo... tantas preguntas que quiero hacerle... no sé por donde empezar- dijo nervioso a la vez que encendía la grabadora.

- ¿Qué tal si le cuento mi historia desde mis primeras memorias?- le preguntó al periodista.

- Me parece bien- dijo preparándose para anotar.

- ¿En serio? Necesitarás más libretas y Gigabytes de almacenamiento para la larga historia que tengo por contarte- dijo mientras se volteaba por primera vez.

George vio por primera vez el rostro de Issei Hyodou y se sorprendió. Al contrario de su nombre japonés, su rostro era aristocrático europeo, de aquellos rostros que verías en pinturas viejas de la edad media. De cabello castaño amarrado en una pequeña coleta, pómulos altos, mirada severa y ojos verdes que parecían dos esmeraldas al sol.

Pudo apreciar más detalles como su postura recta, la típica que verías en una película vieja sobre caballeros; espalda recta, cabeza alta, brazos detrás de su espalda.

Con chaleco negro, manga larga roja, pantalón de vestir negro, y zapatillas que hacían eco con los pasos.

- Estoy listo- dijo en un susurro

- Entonces, déjame presentarme formalmente- dijo el castaño para sentarse en la mesa - Actualmente estoy bajo el nombre de Hyodou Issei, pero nací con el nombre de Nicolas, posteriormente se me otorgó el apellido "De Londinium" quedando como "Nicolas De Londinium" y nací en el año 498 después de cristo.