♡~Un amor inesperado~♡

Un mes de embarazo...

"Qué los cumplas feliz... Qué los cumplas feliz... Qué los cumplas George, qué los cumplas feliz" todos aplaudieron.

Yo aproveché que estaba a un lado de él para besuquearlo un poco y decirle que lo amaba. Empezamos a partir el pastel y repartirlo, los niños pidieron que les pase toallas para secarse y poder entrar a comer.

Todos nos felicitaron por el bebé y nos dieron las gracias por la linda comida, nos ayudaron a limpiar todo, junto con Eliana, la sirvienta que habíamos contratado en esa semana, ella se encargó del resto mientras nosotros nos despedíamos de los demás.

Ya estando prácticamente sólos, nos echamos al sillón, de tan cansados, nos dormimos en él.

La horas siguieron pasando, por la tarde, nos duchamos y fuimos a la reunión que habría en el set. Llegamos unos diez minutos antes y decidimos esperar en una jardinera del estacionamiento mientras charlabamos de la novela. No fue tanto lo que hablamos, ya que llegaron los niños y los demás. Entramos todos juntos, y Juan nos hizo entrar a la sala, donde había una mesa enorme, pues éramos muchos.

Todo transcurrió normal, nos hablaron de la organización para el final, de los cambios que habría, pues ya no podría hacer más escenas del Chicago y yo pedí hacer sólo la última, en la que Fernando descubre a Ana, ya habíamos ensayado esa escena varias veces, pero aún no estaba grabada. Luego de dos horas de organizar todo, terminamos. Siendo las 21:00 nos fuimos a un parque, al ver un sendero de flores y fuentes, decidimos caminar por él; la noche era perfecta, el cielo totalmente estrellado, las flores, las fuentes de agua, la luna, aquella luna tan inmensa y luminosa, y nosotros, dos seres humanos, que se enamoraron inesperadamente...

Caminando por aquel lugar, abrazados, dándonos mimos y besos, tras los infaltables "Te amo", hicieron de esa, una de las mejores noches que habíamos tenido.
Al ver una banca en aquel mágico lugar, nos sentamos abrazados.

Jorge: Gracias mi amor, por el mejor cumpleaños de mi vida...-
Silvia: No tienes porque darme las gracias mi amor, te amo, y eso me lleva a hacer hasta lo imposible por verte sonreír.-
Jorge: Yo también te amo princesa, y también haré hasta lo imposible por ver esa sonrisa tan hermosa que tienes.- nos unimos en un tierno y largo beso. Al separarnos por falta de aire, nos paramos para seguir caminando tomados de la mano.

Llegamos al coche, Jorge me ayudó a subir y luego subió él.

Al llegar a casa, me agarró un antojo.

Silvia: Jorge... ¿Sabías que te amo cierto?.- abrazándolo por detrás, con tono de niña chiquita.-
Jorge: Sí ajá, ¿qué quieres?.- él sabía perfecto que yo quería algo.-
Silvia: Ay, qué mala onda la tuya... Yo diciéndote que te amo y tu pensando que quiero algo.- cruzándome de brazos.-
Jorge: Mi vida, te conozco perfecto, sé que quieres algo.- abrazándome y dándome un beso en la mejilla.-
Silvia: Es cierto, quiero algo. Quiero de esas tortillas que hace doña Martita con chile y huevos rancheros.-
Jorge: ¿De doña Martita? Mi amor, su tienda está prácticamente del otro lado de la ciudad.-
Hice una cara tierna que hacía que Jorge no me pudiera decir que no.
Jorge: *suspiro* Está bien, tortillas con chile y huevos ranchero. ¿Algo más?.-
Silvia: Sí, sólo una cosa más... Te amo.-
Jorge: Y yo a ti mi amor, y yo a ti...- le di un beso, tomó una chamarra y sacó el coche.-

Silvia: Bueno angelito, quedamos sólos por un rato.- acaricié mi panza y me fui al sillón, encendí la televisión buscando que ver, al no encontrar nada, la apagué, y cogí mi celular para leer algunos tweets que tenía. Ahí me entretuve por un rato, hasta que vi la hora, se me hacía raro que Jorge aún no halla vuelto, lo llamé pero no contestaba, comencé a preocuparme.

***

Pov Jorge.

Ya había comprado las tortillas de Silvia, pero me detuve para comprarle unas flores, me encontré con un viejo amigo y empezamos a platicar unos minutos.
Saqué mi teléfono para ver la hora y me topé con tres llamadas perdidas, me despedí de aquel amigo y tomé rumbo a casa.
En el coche, intenté llamar a Silvia, pero se me acabó la pila. Minutos después llegué.

Fin pov Jorge.

Al escuchar el carro de Jorge entrar, sentí un gran alivio, entró a la casa y corrí a abrazarlo.

Silvia: Ay mi vida, que bueno que estás bien, me preocupé al ver que no llegabas.-
Jorge: Tranquila mi amor, aquí estoy. Sólo paré para comprarte flores y me encontré a Franco.-
Silvia: ¿Y tu teléfono?.-
Jorge: Se le acabó la pila.-
Silvia: Está bien, lo importante es que no te pasó nada.- lo volví a abrazar y le di un beso.-
Jorge: Aquí tienes, bonita.- me entregó un ramo de rosas.-
Silvia: Están preciosas mi amor, gracias.- besé su mejilla y pasamos a sentarnos en la estancia, yo fui por un jarrón para las flores.- en la cena, recordamos nuestra niñez, aventuras, novelas y películas que habíamos hecho. Terminamos la cena y nos fuimos a poner las pijamas para descansar.

El siguiente día, todo transcurrió normal, bueno no tanto, estuvimos organizando todo para la fiesta que habría el domingo, osea al otro día; tanto las comidas, como las decoraciones, en esas mee ayudaron mis amigas, todo ya estaba listo, esa noche, dormimos temprano para el otro día poder estar con la mayor energía.

Ese domingo...

Desperté por los besos de mi galán, quien de tanto besar mi panza, me empezaba a dar cosquillas.

Jorge: Mira quien despertó angelito, sí, mami...-
Silvia: Buenos días mi amor pequeñito, buenos días mi amor grande.-
Jorge: Buenos días bonita. Al fin llegó el día, hoy nuestro angelito, cumple un mes de que habita en tu vientre.- lo decía amorosamente.-
Silvia: Lo sé mi amor, ya un mes desde que nuestro amor dio frutos.- le di un beso y un abrazo.-
Jorge: Bueno, mejor ya empezamos a prepararnos porque tenemos que empezar las comidas.-

Nos metimos a bañar, nos vestimos bien formales, y bajamos a desayunar.

Ya luego nos pusimos a preparar la ensaladas y Jorge la carne asada, cerdo, pechugas, y cordero.

La fiesta empezaba a la misma hora que el cumpleaños de Jorge, entre 13:30 y 14:00.

Salí al patio hasta donde estaba una hamaca "paraguaya" que estaba amarrada por dos árboles y en una sombra muy agradable, giré mi cabeza hacia la piscina, y recordé que los niños querrían jugar en ella, me dirigí al deposito para sacar las redes de voleibol, pelotas, camas acuáticas, inflables y demás.

Aquí el siguiente cap, muy pronto traeré un maratón a pedido de unas molestas pero increíbles personitas. En fin, hasta mañana, las amo, besos.
Bendiciones :* Sean felices

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