Bien es dicho que en el Conalep puedes no acabar la escuela pero sí acabar con familia.
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• Mexicanismos.
• Omegaverse.
• Referencia al abandono.
• Homofobia.
• Alusión al clasismo.
• Alusión a la xenofobia.
• Referencia al uso de bebidas alcohól...
No sé por qué la cama se me hace tan recia cuando intento dormir, pero tan blanda cuando me intento despertar. Desde hace unos meses ya temía este día; cumplir el horario completo de mi pinche escuela todo porque mi tío no cree en la ciencia moderna, inaudito.
No mames, la liga de la justicia estuvo a punto de reclutarme. ¡En otra vida será, Mujer Maravilla!
Con chingo de hueva me tallé los putos ojos e hice mis huesos crujir bien rico, para alivianarme tantito. Me levanté y fui directo a rebuscar en mis cajones el uniforme de la escuela ¿Cuál era el horario de hoy? Bueno, encontré el de diario, ya que me la hagan de a pedo allá.
Preparé un bote para bañarme al rato, y en lo mientras me senté a tragarme los restos de unas galletas Arcoíris que encontré ayer en mi mochila, total, “Caducan…” no mames, estaban pasadas.
Miro el bodrio que tengo por hogar, anotando limpiarlo cuando llegue. Ya después de limpiarme las impurezas a jicarazos, caí en cuenta que mi uniforme estaba todo arrugado a la verga. Ya mañana le paso la plancha, lo juro.
Acomodé la cadena de la bicicleta para no caminar todo el baldío de aquí a la chingada, y con pura fe la hice andar hasta la mitad del recorrido. Valgo verga. Aproveché que la primer clase es puro relleno y paso a comprarme un lunch rápido en Abarrotes "Lucy". Uno balanceado y saludable porque mi edad no está pa' echarle cargas innecesarias.
—¡Señora, a cuánto están las Trikitrakes!
Las galletas tienen leche, huevo y chocolate. Además de como dos o tres sellos de la secretaría de salud pero la neta nadie los pela. Mejor que sobre a que falte.
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Media hora. Media hora me hice de camino. No lo entiendo, si la escuela empieza a las 7, y me levanté a las 6:83 ¿Hice mal algún cálculo?
—¡Oigan todos, acaba de llegar Pérez! ¿No tendrán un pan para este muerto de hambre?
—Chingas a tu madre Stroll, perra bastarda. Me acaban de decir que ayer hicieron equipos para laboratorio, ¿Me metiste en tu equipo, verdad?
—Ps si, no teníamos a otro a quien traer de nuestro pendejo.
—¿Quién te enseñó a hablar así, sarnoso?
—Fuiste tú, amor. Por cierto, se me olvidó que hubo chisme; resulta que los rumores del profe de física eran ciertos, y pues ya va para fuera. Hoy llega el de reemplazo, si es que no maneja polvos mágicos como el otro.
—Pues al chile ojalá al nuevo lo atropelle un camión de ocho llantas, me caga física-
—¡Sergio Michel Pérez Mendoza! ¿Qué es esa forma de hablar?
¿Alguna vez han sentido un escalofrío recorrerles la espalda? Eso es porque Toto Wolff les está hablando, y no es cualquier voz: es la voz de mando.
