Jerry estaba paseando por el parque cuando vio a un chico sentado en una banca. Se acercó lentamente y lo miró detenidamente. El chico se llamaba Jonathan, y era increíblemente atractivo y guapo, con una mirada tímida que hacía que Jerry tuviera ganas de conocerlo mejor.
- Hola, ¿cómo te llamas? -saludó Jerry con una sonrisa amigable.
- Hola, soy Jonathan -respondió el chico, sonrojándose un poco.
- ¿Qué estás leyendo? -preguntó Jerry, curioso.
- Estoy leyendo una historia de amor -respondió Jonathan, mostrando el libro.
Jerry se sorprendió, ya que era uno de sus géneros favoritos. Comenzaron a conversar y descubrieron que tenían gustos muy similares en libros, música y películas. Jonathan hablaba tímidamente, pero Jerry encontraba su voz encantadora.
Decidieron encontrarse esa misma noche en una cafetería para seguir conversando. Jonathan aceptó de inmediato y Jerry marcó la dirección en su teléfono.
Más tarde, en la cafetería, Jerry esperaba nervioso la llegada de Jonathan. Cuando finalmente llegó, Jerry quedó impresionado por lo bien que se veía. Conversaron durante horas y todo salió perfectamente. Jerry regresó a casa esa noche con la cabeza llena de pensamientos sobre Jonathan.
Al día siguiente, Jonathan invitó a Jerry a su casa. Mientras charlaban, Jonathan se levantó para ir a la cocina y Jerry vio que se le cayó un diario al suelo. Lo recogió y lo hojeó sin querer, encontrando algo que lo dejó sorprendido.
Jonathan regresó y vio lo que Jerry estaba leyendo. Estaba tan avergonzado que salió corriendo y se fue llorando. Jerry se sentía mal por lo sucedido y lamentaba haber invadido la privacidad de Jonathan.
Después de un rato, Jonathan se armó de valor y confesó la verdad a Jerry. Resultó que también era gay, pero había estado demasiado asustado para admitirlo. Jerry también confesó sus sentimientos y le propuso a Jonathan ser algo más que amigos, ser novios.
Jonathan se emocionó y aceptó la proposición. Se abrazaron con fuerza y se dieron su primer beso, sellando así el comienzo de una nueva etapa en sus vidas.
Al dia siguiente:
Jerry y Jonathan están paseando juntos Jonathan ve a un chico que lo hace conocido y era Max su amigo de la secundaria Max abrazó a Jonathan y le dio un beso en la mejilla Jerry celoso y le preguntó.
Jerry: ¿Quién es ese chico que te besó en la mejilla, Jonathan?
Jonathan: Ese es Max, un viejo amigo de la secundaria.
Jerry: ¡No me gustó nada que te besara así!
Max: ¡Hola Jerry! No quise molestarte, solo quería saludarte y conocer al novio de mi amigo.
Jonathan: Déjame a solas con Max un momento, ¿sí?
Jerry: (celoso) Está bien, pero no te tardes.
Max: ¿Sabes, Jonathan? Eres lindo, tierno y me gustaría ser tu novio.
Jerry: (furioso) ¡¿Qué?! ¡Eso no puede ser verdad!
Jerry se levanta de la silla y se va y agarra la mano a Jonathan, dejando solo a Max.
Max: Me disculpo por lo que dije, Jerry. Yo solo...
Jerry: (interrumpe) ¡No quiero escucharte! ¡Vamos a casa, Jonathan!
Jonathan: Bueno, está bien. Nos vemos, Max.
Al día siguiente, Max se acerca a Jerry para disculparse de nuevo.
Max: Lo siento mucho, Jerry. No quería causar problemas.
