Negativo | Sanlu

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Su cabeza estaba en blanco, simplemente no sabía en que pensar, solo se dedicaba a caminar y si no fuera por el peso entre sus brazos muy seguramente se hubiera perdido sin ningún destino fijo. Observó al enfermero afuera mirando su celular, alzo un poco la mirada, alarmandose al verlos, se acercó y cargo a Luffy de sus brazos, de pronto se sentía completamente vacío. Ah, le duele demasiado.

—No está en celo —dijo Crocus una vez acomodo a Luffy en la camilla, poniéndole una compresa en la frente y colocandole el termómetro-. Veo que conoció a su destinado, que curioso, solo he conocido a dos personas en mi vida que lo encontraron y ya he vivido mucho.

—Mmm... —distraído se encontraba sentado al lado de la camilla, observando los pies de su novio, le había quitado las zapatillas por recomendación del enfermero.

—Solo necesita reposo, le daré unas pastillas para el dolor y la fiebre. Puedes retirarte si quieres.

—No, me quedaré.

Crocus lo miro curioso, pero asintió en silencio: —Si gustas. Iré un momento a dirección para hablar sobre este tema con Kuzan.

—Okey —al irse el enfermero Sanji siguió perdido en sus pensamientos. No sabía en que pensar, ni que decir, se sentía angustiado. La mirada ansiosa de su pareja al verlo, pidiéndole que este a su lado a pesar de tener a su destinado al frente suyo le hizo eco en la cabeza. Lo estaba eligiendo por encima de todo—. A mi... —se sentía basura de pensar en que quizás si él estuviera en la misma situación no haría eso, no lo sabe, pero debido a tantas cosas incluso duda de si mismo y de su amor. Negó con la cabeza, no puede hacer eso, realmente ama mucho a Luffy "¿Lo amas lo suficiente como para dejarlo ir?" escuchaba en su cabeza a su hermana mayor mirándolo con desaprobación.

—¿Sanji?

Miro hacia donde era llamado, aun estaba algo desorientado como para captar qué Luffy ya estaba despierto: —Hola.

—Hola.

La cicatriz en su nariz le hizo verlo largos segundos, según tenía entendido se la hizo en una pelea qué tuvo por defender a Zoro, sin dudas su novio era una persona confiable, capaz de defender a todos a su alrededor.

—Cierto, tienes que tomar unas pastillas qué dejo el viejo Crocus —se levantó para ir a por un vaso de agua bajo la atenta mirada del pelinegro.

—¿No dirás nada?

—¿Sobre que?

—Me empujaste.

Casi lo olvida.

—Yo...no quise hacer eso, solo me asuste porque... —aun de espaldas sintió un nuevo temor, incluso más grande que el del principio, tenía miedo del rechazo que supondría.

—Porque nos podían ver —la amargura en sus palabras le hizo temblar.

—Luffy, yo, sabes que no quiero-

—Lo entiendo —levantando la mano lo hizo callar—. No hace falta que me digas más. Esta bien, solo no lo vuelvas a hacer.

—Esta bien...

Acercándose con el vaso de agua se sentó y entrego las pastillas a la par del recipiente. Luffy se las trago rápido y bostezo al acabar, estaba cansado de tanto movimiento.

—En fin, a todo esto ¿Qué era a lo que venía tu papá?

—Nad... —carraspeo— El chico, el alfa aquel, se cambiará a esta escuela.

—Ah ¿Es algun primo tuyo entonces?

—Algo así.

—Ya veo.