The death kiss

Capítulo 14

-¡No te entiendo en absoluto! Primero me dices que solo estas aquí por mí y me besas, pensé que teníamos algo pero no. Después me evitas me ignoras y me tratas así. No te entiendo. Si no quieres estar conmigo entonces renuncia a tu trabajo y ya no nos veamos de nuevo.-estaba demasiado-

-Aunque renunciara a este trabajo aun así tengo que estar cerca de ti. Tu no comprendes el peligro en el que estas, te la pasas escapándote por ahí con alguien peligroso.

-¡Ned no es peligroso! Lo conozco desde hace mucho tiempo. En cambio a ti solo llevo unos meses de conocerte no sé nada de ti y no me has contado nada sobre nuestra especie. Ni siquiera se en que peligro estoy porque tu no me dices nada.

-Si te lo digo no lo comprenderías.

-¿Cómo lo sabes? Ni si quiera lo intentas.- Ángel estaba muy enojado. Sus manos estaban en forma de puño y parecía que pensaba en algo pero estuvo mucho rato son decir nada.-Si seguirás así es mejor que te alejes de mi.-dije saliendo del cuarto y cerrando la puerta tras de mí. Me recargue en la puerta. Mi corazón latía muy rápido por lo exaltada que estaba pero que estoy haciendo no puedo correr a Ángel de mi lado, yo lo... necesito. Volví a entrar al cuarto pero Ángel ya no estaba ahí.

A la mañana siguiente pregunte por Ángel pero al parecer no había regresado. Decidimos ir a la escuela a ver si se encontraba ahí pero no apareció en todo el día.

A la salida recargada en el auto de Ned estaba la chica que se había llevado en la fiesta de disfraces.

-Judith, ¿Qué haces aquí?

-Vine por ti ¿Por qué te escapaste?

.Yo no me escape, solo regrese a donde pertenezco.

-Tú perteneces a la manada.

-Judith, también me siento parte de la manada pero no soy como tu yo no crecí junto a ellos. Yo tengo otra vida ya hecha y está aquí. Eso no quiere decir que no vaya a visitarlos o no me interese las cosas de la manada...-mientras Ned hablaba la chica nos miraba a nosotros y también a Arthur que se encontraba del otro lado del estacionamiento. Entonces lo interrumpió.

-Ned, ¿podríamos hablar en privado?

-Ahora vuelvo.-me dijo Ned y se apartaron un poco de nosotros, empezaron a hablar en esa lengua extraña otra vez. Ned me había contado que decían que era la lengua la habían hablado desde que el primer hombre lobo fue creado y ellos eran muy tradicionales y no les gustaba cambiar sus costumbres.

-¿Qué hace ella aquí?-dijo Laura que se reunía con nosotros.

-¿Es la chica que se llevó a Ned?-pregunto Lili. Asentí con la cabeza y les hice una señal de que ellos nos podían escuchar.

Mire de nuevo hacia Ned. Parecía molesto su tono de voz era cada vez más fuerte.

-¡Basta!- grito.- No permitiré que digas esas cosas.-se dio la vuelta y la dejo ahí sola parada.

-Vámonos.- nos dijo. Como siempre lo habíamos hecho Ned, Lili y yo nos subimos a su auto la única diferencia era que ahora nos acompañaba Laura. Ned se veía muy enojado.

-No puedo más.- dijo. Estaciono el coche.- las dejo. Luego las alcanzo.-se bajó del auto y empezó a correr hacia el bosque. Todas nos bajamos del auto y le gritamos que a donde iba pero no nos hacía caso.

-Voy con él.-dije y empecé a correr a su dirección. Pude escuchar que Arthur salió de su coche y le preguntaba a las quicas que pasaba.

Ned corría demasiado rápido, como un animal, me sorprendió sentir que yo corría igual de rápido. Ya casi lo alcanzaba.