Tweek entendió más tarde que nunca que Craig no era alguien de palabra precisamente, pues apenas llevaba un día en el trabajo y eran las 7:45 y el hombre no llegaba.
-Butters, en serio lo siento, veré que esto no vuelva a pasar. -Aseguraba Tweek mientras estaba de un lado al otro moviéndose por la casa esperando a que llegará Craig para poder ir a su otro trabajo, Laura y Tricia no estaban en la casa y no se sentía cómodo dejándolo con las sirvientas.
Red era buena persona, pero extremadamente distraída y Jenny... no algo no le gustaba de Jenny.
-No pasa nada, Kenneth me está ayudando. -Tweek suspiró aliviado dejándose caer en el sofá, Kenneth McCormick era el novio de su mejor amigo, así que estaba en buenas manos.
Tweek volteo a ver el reloj y notó que ya casi eran los ocho, por lo que decidió esperar en la recamará de León, cuidando su sueño para que durmiera más tranquilo.
Sin embargo, la tranquilidad del bebé era hipnótica que, no supo cuánto tiempo durmió antes de que alguien lo despertará.
-Hey, chico, pst. -Tweek se removió un poco en sus brazos y entonces vio a un chico de pelo castaño con ojos marrones viéndolo fijamente con una sonrisa.
-Vaya, sí que te pareces a mi hermano. -Dijo el castaño con una media sonrisa. -Soy Clyde Donovan, hermano de Thomas Donovan, mamá de este chiquillo.
Tweek se le quedo viendo como si un tornillo le faltará antes de gritar, pues no se creía eso porque nadie le aviso sobre la existencia de otro tío que no fuera Tricia. El castaño pareció adivinarle el gesto y le tapó la boca hasta sacarlo de la habitación.
-Tranquilo tigre, me estas a punto de morder. -Clyde era un omega como él, por lo que le costó sacarlo de la recamará de León. -Me mandó Craig.
- ¿Qué?, Yo... ¿Cómo sé que me dices la verdad? No te conozco, nadie me ha dicho nada. -Tweek estaba protegiendo la entrada al cuarto de León cosa que le pareció bien a Clyde.
-Vaya, que buen trabajo haces. -Alabó el castaño mientras sacaba su teléfono. -A ver deja le llamó.
El castaño marcó un número y después de un momento de silencio se escuchó una voz del otro lado.
-Craig, amigo ya estoy en tu casa con la rubia...Ay pero que delicado. -Tweek juro escuchar una mentada de madre del otro lado. -Oye dile quien soy para que me deje quedarme con León.
Clyde entonces le paso el teléfono a Tweek quien lo contestó no muy seguro de que decir a la otra persona que estaba del otro lado de la línea.
- ¿Hola?
-Tweek, soy Craig. -Rápidamente el rubio identifico el tono de voz del hombre. -El estúpido enfrente de ti es mi cuñado Clyde, es el tío de León y él se va quedar ya que yo tengo mucho trabajo que hacer, será por hoy que él tiene tiempo libre.
-Pensé que siempre venías a dormir.
- ¿Me vas a esperar hasta las doce? -No definitivamente no podía dejar a Butters las horas pico de su cafetería.
-Que descanse señor Tucker. -Colgó la llamada, mientras le pasaba el teléfono al castaño que tenía una media sonrisa en el rostro.
-Ya hace falta que alguien domine a ese cabrón, ni su madre puede. -Aseguro Clyde dándole palmadas en la espalda del rubio. -Suerte con él.
-Mi trabajo es con León, no con Tucker. -Menciono algo enojado el rubio haciendo reír a Clyde.
-Si, si tú lo dices. -Le guiño el ojo mientras entraba al cuarto de León, Tweek lo vigilo un rato antes de salir corriendo de la casa y llegando casi a las 12 a la cafetería.
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Pequeños Milagros
FanfictionTweek ha tenido una vida de mierda y un pasado trágico, perdiendo a su madre cuando era chico y con una horrible madrastra y hermanastro que lo han alejado de su familia, quedando solo con sus mejores amigos. Sin embargo, después de salvar a un niño...