01 El reencuentro

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Capítulo 01

El reencuentro

Juliana Valdez una gran escritora reconocida, iba camino a una importante reunión. Como siempre un poco distante, con los pensamientos perdidos.

- Hija, te estoy hablando. Decía Guadalupe madre de Juliana quien observaba a la castaña perdida en sus pensamientos como siempre.

- Sí mamá tengo una reunión en media hora, afortunadamente es en la oficina y al parecer es un proyecto nuevo. No, no vendré a almorzar, quizá salga con Lauren y sí ya llame a Michell me dijo que está bien y que me espera el próximo fin de semana. Ah y no, papá no está en México, me dijo que llega el fin de semana. Respondía Juliana cada una de las preguntas que su madre le había hecho de manera seguida.

- Juliana solo quiero que prestes atención cuando te estoy hablando. Juliana alzó su mirada a su mamá quien sentada frente a ella en la mesa del comedor de la inmensa casa. - Hija como me gustaría verte sonreír, salir como antes con tus amigas. Ser esa chica alegre. Antes de conocer a esa mujer, en mala hora la conociste.

- Ya mamá por favor. No soy la misma. Y tal vez la que no debió conocer a nadie fue ella. Juliana se levantó y caminó en dirección a su madre y le dejó un beso en su mejilla. - Te quiero. Nos vemos luego.

- Te amo princesa. Te amo mi bebé hermosa. Tú eres una increíble mujer. Ten un bonito día. Se despidió la elegante mujer.

Cómo cada día Juliana salió de la mansión y fue en su camioneta para la reunión que tenía destinada. Una llamada en el camino la sacó de sus pensamientos, cada día, cada pensamiento era para la mujer de la que se había enamorado.

- Dime Lauren.

- Buenos días mejor amiga, más que amiga hermana. ¿Cómo estás? Así se contesta el teléfono Juliana. No estás cosas que me dices tan secas. Tengo que pagar un psicólogo por tú culpa. Decía sarcásticamente la amiga de la castaña.

- Ya déjame en paz Lauren. Ya sabes que los chistes del psicólogo no me gustan. Respondió Juliana por medio del auricular.

- Lo siento. Yo no tengo culpa de nada. Buenos días. Te llamo para saber ¿Vamos a cenar esta noche?

- Sí Lauren. Hoy tengo una reunión y luego tengo que ir a revisar unas cosas en la oficina. Nos vemos para cenar y no te pongas a inventar de presentarme chicas. No estoy de humor.

- Nunca lo estás. Pero te prometo que no haré ninguna de mis ideas para que seas feliz. Tú mejor amiga estará portándose bien.

- ¿Nos vemos donde siempre? Preguntó Juliana cuando un vehículo comenzó a sonar la bocina.

- Sí Juli. Ya mueve tu trasero de donde estés que los gritos de ese infeliz se escuchan aquí. Decía Lauren al otro lado del auricular.

- Bueno nos vemos. Cortó la llamada la mujer y puso en marcha el vehículo después de estar detenida cuando el semáforo estaba en verde.

Llegó al edificio donde tenía la reunión pautada. Saludo al personal y fue recibida por la asistente de presidencia. Con una sonrisa amable llegó al salón donde estaban personas ya conocidas por ella. Entre ellas una de las escritoras más reconocidas del medio novelístico. Camila una escritora venezolana. La poeta cubana Eva, quien estaba de número uno del momento. Estaba allí una de las escritoras más importantes de su país y otras de gran reconocimiento. Juliana saludo a cada una de las personas en la sala.

- No pensé que vendrías. Dijo Deborah gran escritora mexicana. Juliana la observó extrañada y se sentó a su lado.

- ¿Por qué no vendría? Esto es una gran oportunidad. Deborah la observó un poco extrañada. Eran grandes amiga, solo que las ocupaciones no las hacían hablar tan a menudo. Deborah miró aún más extrañada a Juliana y solo pensó. <<Bueno quizá es su oportunidad>>

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