Jung MinJi - Park JiMin.
Ya había olvidado lo exquisito que se sentía el que sus manos ásperas y fuertes acariciaran mi cuerpo, porque a pesar de que la textura de sus manos era tan rústica, él me tocaba con suavidad, como si mi cuerpo, mi piel y todo mi ser fuera tan delicado como la porcelana.
Sus besos... Los había olvidado por completo, la forma en como frunce el ceño cuando me besa, lo estaba olvidando.
¿Por qué lo estaba dejando de lado? ¿Por qué intenté olvidar todo lo que pasamos juntos?
-Me encantas~
Su susurro sobre mi oído me eriza la piel y me hace soltar un jadeo, puedo sentir sus músculos tensarse cada vez que paso mis manos por su espalda ancha y desnuda, a JungKook le gusta, porque dice que mis manos son suaves y le recuerdan al tacto del algodón.
-Te amo... -salió de mis labios, y mis ojos se abrieron, observando a un JungKook de dieciocho años encima de mi, compartiendo un momento de intimidad y excitación.
Estoy divagando entre mis recuerdos.
-Yo te amo aún más, Minnie.
Y duele mucho recordar esto... Porque para él esto dejó de ser importante y se convirtió en algo innecesario.
¿Cómo puedo borrar ese recuerdo de mi mente?
-Papito... -la voz suave e infantil de mi niña me despertó, mis ojos se abrieron con algo de pesadez, y para mala mía, estaba dándole la cara al sol, lo que me encegueció rápidamente.
Dios... Mi cabeza, me duele un montón.
-¿Qué sucede, Nat? -me senté en la cama, sosteniendo mi cabeza, un taladro me está perforando el cerebro.
-¿Por qué mimiste aquí? -me preguntó con su voz llena de curiosidad-. ¿Ya no quieres a papá?
Yo no he dejado de amarlo desde hace ocho años enteros... Pero espero empezar a dejarlo a partir de este momento.
-Claro que si... Es solo que ayer tenía mucho sueño que me quedé dormido aquí -le dije con una suave sonrisa-. ¿Ya ves lo descuidado que soy?
-¡Shi! -respondió con una risita traviesa, pero su carita rápidamente se iluminó al recordar algo importante-. ¡Ah! Papá Woon está haciéndote el desayuno. Dice que te apures, que ya está listo y tenemos que comer.
Sonreí débilmente, sintiendo cómo mi corazón se apretaba un poco más al escuchar el nombre de JungKook. Me levanté despacio, acariciando la cabeza de la cachorra con ternura.
-¿Papá te mandó a despertarme? -pregunté, intentando sonar casual mientras me ponía de pie.
-¡Sí! Dice que te apures, porque si no, se enfría todo y ya sabes que no le gusta que la comida se eche a perder.
Suspiré. Así era él, siempre tan cuidadoso con los detalles, como si cada cosa pequeña importara más de lo que parecía. Y aunque era precisamente esa parte de él la que alguna vez me enamoró, ahora solo me recordaba lo complicado que todo se había vuelto.
Caminé hacia el baño, tratando de ignorar el dolor punzante en mi cabeza. La noche anterior había sido un torbellino de emociones, pero los detalles eran un borrón. Recordaba claramente que había bebido demasiado con SeokJin a mi lado. Y en medio de esas copas, me encontré llorando a mares, desahogando todo lo que sentía: cuánto amaba a JungKook, pero también lo mucho que lo odiaba por lo complicado de nuestra situación.
Natsumi me seguía con pasos pequeños, con su mirada curiosa fija en mí. La veía y, de repente, el peso de nuestra realidad me abrumó. La misión nos había unido, pero el amor que fingíamos delante de ella era un juego peligroso. Teníamos que actuar como una familia perfecta, aunque nuestro vínculo fuera solo una fachada.
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Double Life ꒰→ 🍂‧₊˚꒱ Km
FanficUn mundo donde la paz mundial es amenazada por el ejército japonés, y para seguirla manteniendo, La República Unida de Corea une a sus dos mejores agentes secretos en una misión muy importante. Dónde el agente Park es unido junto al agente Jeon en...