EL PRINCIPIO DEL FIN

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"Maydey, Mayday, nos están atacando, repito nos están atacando." La voz de alex sonaba desesperada a través de la radio.

"Alex, dame tu ubicación actual," respondió maya, su voz firme pero preocupada.

De repente, un grito horrorizado resonó en la radio.

"¡Ahhh que carajos es eso, santo cielos!!! Son como langostas y miden más de tres metros aproximadamente."

"Alex, aléjate de ahí," ordenó Maya.

"Mierda, nos vieron, mandar refuerzos, repito mandar refuer..." La voz de Alex se cortó abruptamente.

"¿Alex? Alexxx!!!!" Maya gritó, su voz llena de angustia.

La estática de la radio se prolongó durante unos segundos, hasta que una voz desconocida respondió.

"Meidei, aquí es el Comando Central. Informen sobre la situación."

Maya tomó una respiración profunda antes de responder.

"Comando Central, tenemos una invasión en curso. Criaturas gigantes, similares a langostas, están atacando nuestra posición. Alex ha sido separado de nuestro grupo. Necesitamos refuerzos urgentemente."

La respuesta del Comando Central fue breve y concisa.

"Meidei, enviamos refuerzos. Aguanten."

Pero Maya sabía que la ayuda podría llegar demasiado tarde. La invasión había comenzado, y nada volvería a ser igual.

_Tres años antes..._

La humanidad se encontraba en ruinas. Las bombas nucleares habían devastado el 70% de la vida humana, dejando solo un 30% de supervivientes. La esperanza parecía un lujo inalcanzable.

La ciudad de Nueva Eden era uno de los pocos lugares que habían logrado reconstruirse. La organización humanitaria, "La Nueva Esperanza", había establecido un refugio seguro para los supervivientes.

Alex, un joven de 25 años, se encontraba entre ellos. Había perdido a su familia en el holocausto nuclear y ahora luchaba por encontrar un propósito en un mundo sin futuro.

"¿Cuánto tiempo más podemos aguantar?" preguntó Alex a Maya, una enfermera que trabajaba en el refugio.

"Tenemos que seguir adelante," respondió Maya, su voz llena de determinación. "La humanidad no puede desaparecer sin luchar."

Pero la lucha era difícil. Los recursos escaseaban, y la radiación aún persistía en el aire. La salud de los supervivientes se deterioraba con cada paso.

De repente, un grupo de científicos llegó al refugio. Liderados por el Dr. Kim, un experto en física nuclear, traían noticias esperanzadoras.

"Hemos descubierto una forma de purificar el agua y el aire," anunció el Dr. Kim. "Podemos hacer que la Tierra sea habitable nuevamente."

La noticia se extendió como un reguero de pólvora. La esperanza renació en los corazones de los supervivientes.

ALEX

Antes del ataque nuclear, Alex tenía una vida normal. Estudiaba en la universidad y trabajaba a tiempo parcial en una tienda de electrónica. Su familia era pequeña pero unida: su madre, su padre y su hermana menor, Emma.

Pero todo cambió cuando las bombas nucleares cayeron sobre la Tierra. Alex se encontraba en la universidad cuando ocurrió el ataque. Logró sobrevivir gracias a un refugio subterráneo en el campus.

Cuando salió del refugio, se encontró con un mundo en ruinas. Su ciudad natal estaba destruida, y su familia había desaparecido. Alex pasó meses buscando a sus seres queridos, pero nunca los encontró.

APOCALIPSIS, una historia diferente Donde viven las historias. Descúbrelo ahora