Red de sombras | #Chestappen

Capítulo 7

20:39
Auto de Checo

[CHECO]
Una llamada de Max interrumpe la canción de Luis Miguel que venía escuchando. Con lo mucho que me gusta.

—¿Hola?—
—Sergio, ¿dónde estás?— se escucha...alterado. Miro el reloj en el tablero, todavía queda bastante tiempo para llegar al restaurante. —¡Sergio!—
Su grito me asusta. —Voy en camino. Tranquilízate.—
—¿A qué altura vas?—
—Uhm...estoy pasando Westfield.—
—Bien. Escúchame, conduce hacia atrás del centro comercial. Ahí hay un Starbucks, ¿ok?—
—¿Ajá?—
—Quiero que entres y me esperes. No vayas a ningún otro sitio.—
—Pero...—
—Por favor, solo hazlo.—
—Max, ¿todo está bien?— guarda silencio, lo que empieza a alterarme. —¿Max?—
—Sí.— no lo creo. Pero tal vez no pueda decírmelo por teléfono. —Llego en diez minutos.—
—De acuerdo, te veo ahí.—

Colgamos.
Sus palabras me dejan una sensación extraña.

Dejo el auto en el estacionamiento del enorme café. Entro y como no me especificó en qué piso lo vería, opto por quedarme en la planta baja donde pido un espresso tonic, algo un poco fuerte y amargo para poder mantenerme despierto.

[MAX]
Preocupado. Así es como llego al Starbucks Roastery.
Olvidé que es un lugar bastante grande así que ingreso buscando a Sergio. Para mi suerte, lo encuentro sentado en una mesa junto a la barra. La calma vuelve a mí al verlo sano y salvo.

Camino hacia él cuando recuerdo que podrían estarlo siguiendo así que opto por no hacerlo, en su lugar, me coloco detrás de una enorme escultura. Desde aquí puedo verlo sin que él me note. Le mando un mensaje avisándole que ya estoy en el sitio, él me busca con la mirada.

S.P:
¿Dónde estás?

⤷ Lo siento, debo mantener mi distancia.

⤷ ¿Por? :/

Usa ese tonto emoticono.
Le marco por teléfono.

—¿Qué pasa?—
—Mantén la calma, Sergio. Creo que hay alguien siguiéndote.— lo escucho y veo reír nerviosamente.
—No digas locuras.—
—No lo hago. Necesito estar seguro, por eso es mejor si no nos encontramos.—
—Max...vamos.—
—Es en serio.—
—Bien, ¿qué quieres que haga?—
—Vas a subir al bar, ¿ok? Te pedirás una copa mientras yo intento descubrir quién está vigilándote.—
—¿Y si está escondido como tú?—
—Es un riesgo que debo tomar.—
—Ajá, ¿y si no funciona?—
—Ya lo resolveremos. Ahora, hazlo.—

Le cuelgo.
Sergio rueda los ojos, sin embargo obedece.

Mientras sube, pongo atención alrededor. Nadie aquí parece sospechoso y la mayoría no le presta atención, solo algunas chicas lo observan cuando pasa junto a ellas, intercambiando algunos comentarios y risitas que las delatan.

Supongo que lo encuentran atractivo.

Salvo eso, la cafetería sigue operando de igual manera.
Espero algunos minutos sin que haya algún cambio, aún así no voy a bajar la guardia.

[CHECO]
Ya son las 9 con 10 minutos y tengo hambre. Aparte estoy aburrido, si no vamos a cenar me gustaría al menos volver a casa para descansar.

Recibo otra llamada de Max.
—¿Lo descubriste?—
—No.—
—Entonces no me seguían. Ni siquiera sé de dónde sacaste esa idea.—
—Está bien si no quieres creerme.—
—¿Y ahora qué? ¿Cuánto tiempo más planeas tenerme aquí? Estoy cansado.—
—Bien. Pero a tu apartamento no puedes regresar.—
—No inventes, Max. ¿Dónde piensas que pasaré la noche?—
—Con un amigo quizás.—
—El único que tengo lo están investigando, ¿recuerdas?—
—Pensé que tendrías otros.—
—No del tipo para llegar a su casa sin avisar.—