El susurro de las palabras

La tristeza mata

Creí que había terminado, pero no, al parecer nunca termina. ¿qué es lo que debía hacer? ¿las pastillas podrían sanar la herida que aún sangra? ¿si lo hiciera tal vez podría cumplir mi sueño? Si no lo intentaba, jamás podría saberlo, ¿y qué pasaría si jamás lo supiera? ¿afectaría en algo mi vida? ¿por fin podría ser feliz? El hecho es que a veces creo que no es posible, es decir, tengo 18 años, mi cuerpo tiene 18 años, mis ojos tienen 18 años, pero mi mente está tan cansada que creo tener mil años, desde hace años tengo la sensación de estar tan vacía, tan agotada, tan frágil, tan infeliz.
El dolor era cada vez más hondo, la tristeza solo aumentaba de tamaño, sentía que no tenía salida, y si hay una salida ¿cuál es? Yo no sentía que hubiera una salvo la muerte, pero muchos decían que eso no era lo mejor y que no habría vuelta atrás, ¿pero no es eso lo que lo hace una buena solución? Es decir, es fácil, y muchos pueden decir que es de cobardes, pero vamos, ¿es en serio? Una persona que ha sufrido tanto en vida, no busca soluciones largas y difíciles, habría que tener muchas ganas, y la tristeza no deja fuerzas ni energías.