Capítulo 10: En el mar
Año Unificado 652, Doceavo día del Mes Livada
No imaginaba que viajar en barco sería tan aburrido. A veces lamento que aquí no tenga mi celular ni haya televisión o internet.
Y mis dos acompañantes no son muy conversadoras que digamos.
Bueno, se la perdoné un poco a Koyara porque todavía no se acostumbraba a esto de navegar, así que anduvo por ahí sacando el desayuno.
Durante el almuerzo, platicamos un poco acerca del Rey Demonio. Lo cierto es que tenía muchas dudas al respecto.
─El Rey Demonio apareció hace más o menos 500 años ─narró Minoris─. Era un tirano cruel que pretendía apoderarse de todo el mundo por lo que inició una rebelión. Dirigió a sus huestes demoniacas y logró conquistar algunas naciones en Rodinia, pero fue frenado en el reino de Habin.
Un héroe que venía de otro mundo, así como tú, que se hacía llamar Riceo, fue quien lo detuvo, con ayuda de sus siete Superlords, es decir, sus siete lugartenientes lograron vencerlo y el Rey Demonio fue encerrado en una prisión.
Sin embargo, recientemente apareció un culto que pretende despertar al Rey Demonio. Si lo liberan, el Rey Demonio buscará venganza contra nuestro reino, por eso es que debemos detenerlo.
─¿Y por qué querría vengarse de ustedes si según me cuentas, lo derrotaron en otro reino?
─Porque Riceo, el héroe que lo derrotó, es antepasado nuestro ─respondió Minoris─. Es el fundador de nuestra dinastía y de nuestro reino, por eso sabemos que el Rey Demonio tomará venganza contra los descendientes de aquel que lo encerró.
Esta historia sonó un poco forzada, pero decidí no hablar al respecto.
─Mi plan original ─explicó Minoris─. Era que, al traerte, fuéramos directamente a enfrentarnos al culto que despertará al Rey Demonio, pero debido a mi error de cálculo que provocó que aparecieras en otra parte, me retrasé seis semanas. Ya no nos queda mucho tiempo porque el Rey Demonio despertará en tres meses y medio aproximadamente.
─Pues tres meses me parece un tiempo razonable para prepararnos.
─Justo nos tomará tres meses llegar a Habin desde Nursa ─explicó Minoris─. Ahí está encerrado el Rey Demonio.
─¿Y tú crees que en ese tiempo logre entrenar lo suficiente para vencerlo?
─Espero que sí ─respondió─. Tienes mucho potencial.
Ella se veía aún más convencida que yo, que no lo estoy tanto. Me gustaría tener un poco de su optimismo.
De esa platica del Rey Demonio, decidí entonces cambiar de tema y preguntar a Koyara acerca de los otros villanos de esta historia: Los Savants. ¿exactamente quiénes son? Lo poco que recordaba de lo que me platicó Larissa no era suficiente. Incluso siento que los Savants de este mundo son diferentes a los de Maho Shiro. Pero la morra no sabía mucho al respecto.
Según ella, los Savants son un grupo de personas que utilizan armas sofisticadas y que parecen hacer milagros (ella lo dijo de este modo porque resulta que la palabra tecnología no existe en este mundo) son liderados por alguien a quien conocen como el Generalísimo, y tienen intenciones de conquistar todo el mundo. Están asentados en un reino al otro lado del continente llamado Edicaria. Actualmente parece que han logrado someter algunos reinos del continente, pero afortunadamente, según Minoris, como Nursa se encuentra del otro lado de todo este desmadre, no debemos preocuparemos de ellos, por ahora.
¿No es curioso que la princesa no se preocupe por unos tipos que están haciendo exactamente lo mismo que el Rey Demonio hizo hace siglos?
Se sabe que los Savants cazan a todos los majis, que como mencioné antes, son los que usan el telesma, pero se desconoce el motivo. Aunque seguramente, por la manera en cómo se comportaron conmigo, los han de llevar a campos de concentración, así como a ya saben quiénes. Tendría sentido que odiaran la magia si usan tecnología.
A mí me invocaron para enfrentarme al Rey Demonio, pero hay otros villanos por ahí dando lata, espero que no se compliquen las cosas.
****
Esa noche dormimos todos amontonados en el único camarote de este barco. Es princesa y todo, pero ¿de verdad no se pudo conseguir una embarcación más grande?
Un fuerte viento me despertó a tiempo para hacer mis necesidades. Y es que como en este barco tampoco había baño, tuve que hacer lo que tenía que hacer en el mar.
De todos modos, el viento aumentó su fuerza cada vez más y el barco empezó a moverse violentamente. Las dos chicas que me acompañaban también despertaron.
─¿Que sucede? ─preguntó la chica albina.
─Entramos en una tormenta ─respondió la princesa.
─¿Cómo es que no sabías que íbamos hacia una tormenta? ─cuestioné.
─Yo no sé de esas cosas ─se justificó─ Solo voy navegando hacia Nursa.
Decidimos encerrarnos en el camarote y esperar a que las cosas se tranquilizaran, pero se veía de lejos que no iba a pasar eso.
El agua alcanzó a entrar dentro del camarote. El peligro de que nos hundiéramos era cada vez más real.
─¿Qué hacemos?
Recordé lo que Minoris me dijo acerca de mis habilidades especiales. Pensé que podía usarlas quizá para estabilizar el barco.
Así que salí al exterior, a donde el viento soplaba con la potencia de un huracán.
Aunque las chicas me vieron salir no me detuvieron, probablemente porque sabían lo que iba a hacer. Creo que Minoris confiaba en mí de hecho.
Pues a ver qué sale.
Me concentré y mi Qualia se manifestó a mi alrededor haciendo flotar algunas de las cosas a mi alrededor (o quizá era el viento el que lo hacía). Seguí concentrándome y un poco de aquella habilidad dorada salió de mí.
Entonces decidí expandir esa aura dorada a todo el barco.
Y no funcionó, lo hice pedazos. Genial Brayan, acabas de destruir tu medio de transporte.
Afortunadamente Minoris y Koyara lograron tomar un pequeño bote salvavidas que venía en el barco, se subieron a él, y luego me subieron a mí.
Me sentía tan incómodo y tan pendejo que no me atreví a mirarlas a la cara.
─Lo... siento.
─No fue tu culpa ─respondió Minoris forzadamente─. Es solo que aún no controlas bien tu poder.
─Entonces sí fue su culpa ─dijo Koyara.
Pero lo más random de todo esto fue que justo cuando nos subimos a ese bote, el clima se calmó. Mierda.
Año Unificado 652, Treceavo día del Mes Livada
Al día siguiente comimos el poco alimento que habíamos logrado salvar. Aunque ya se nos había acabado la comida, Minoris mencionó que la costa continental ya debería estar cerca y que podríamos llegar ahí en la tarde de ese día.
Pero como teníamos prisa, Koyara se ofreció a usar su telesma. Ya lo había visto antes en acción.
Un poco conveniente, pero Koyara tiene la capacidad de manipular el agua, así como los maestros agua de Avatar.
─"AQUA – FLUXUS AQUAE" ─Con este conjuro la albina podía mover el agua a nuestro alrededor para impulsar la embarcación. Cada cierto tiempo descansaba de su faena y luego proseguía.
Se que estuvo mal verla trabajar en eso mientras Minoris y yo no hacíamos más que verla. Al inicio sugerí que la princesa le ayudara con su propio telesma, y ella respondió que no podía porque ella no tenía afinidad con el agua, pero no entendí a qué se refería. Y yo tampoco quise ayudar o capaz y destruía de nuevo el barco.
Por la tarde alcanzamos a ver la costa del continente. Koyara uso sus últimas energías y finalmente llegamos a la playa cual náufragos. Nos permitimos descansar un poco.
─Hay que avanzar ─dijo la princesa─. Cerca de aquí hay un campamento que nos espera.
Un pocos sorprendidos al escuchar esto, reanudamos nuestro viaje.

ESTÁS LEYENDO
Qualia - Fase 1
FantasíaTítulo completo: Qualia (o la Decepcionante Realidad del Género Isekai) Cuatro años después de las aventuras de la bruja Larissa en el mundo de Brayan, la vida del muchacho se mantiene sin cambios. Con 22 años cumplidos y una carrera trunca, entra a...