Sombras del pasado

27. La confesion de Tomura

La mañana llegó por fin llegó, los primeros rayos de sol se colaron por la ventana y despertaron a Izuku quien dormía plácidamente en la cama, abrió sus ojos lentamente, sintió como todo le dolía por lo sucedido, toda la adrenalina había abandonado por completo su cuerpo.Observó su mano la marca de Katsuki había desaparecido, suspiro al mismo tiempo que levantó la vista hacia el sofá donde el Alfa muy apenas cabía acostado, sonrió de lado, ese alfa definitivamente estaba cumpliendo con su parte, recordó el hecho de que lo rescató, su cara se puso roja al recordar sus brazos cuando lo contenía por lo sucedido con su padre, el beso que le demando darle para molestar a Hisashi, y prácticamente como lo estuvo cuidando y apoyando

Izuku se quedó observando un poco más a Katsuki antes de levantarse de la cama, su cuerpo protestaba por cada movimiento que hacía, pero no quería seguir en la cama, se dirigió al cuarto de baño donde preparo la tina y se dio un relajante baño, cuando terminó se sentía sus músculos más relajados, se puso algo cómodo y salió del baño.

Katsuki ya estaba despierto para ese momento, habían traído el desayuno como lo había pedido.

—Buenos días, Zuzu — saludo acercándose al omega y depositando un beso en la frente, solo para recibir un gruñido de parte del omega

Katsuki soltó una pequeña risa al escuchar la reacción de Izuku, disfrutando de esos gruñidos que, a pesar de todo, ya no eran hostiles como antes, para él era un buen comienzo, pensó.

— ¿Cómo te sientes hoy? —preguntó Katsuki mientras se sentaba en la mesa para desayunar junto a su omega.

Izuku suspiro mientras se sentaba frente al alfa — Mejor... aunque no puedo decir que estoy al cien. — admitió mientras tomaba una de las tazas de café.

Katsuki asintió tomando la otra taza y comenzando a desayunar, no dijo nada, pero estaba al pendiente de los movimientos de Izuku, notó que aún le dolía el cuerpo, aunque no le comentó nada. Terminaron de comer en un cómodo silencio.

—Hay que ir con mis padres — comentó Katsuki — debemos decidir qué hacer con Tomura.

—¿Tomura?

—Sí, fue capturado cuando la casa de campo de tu madre explotó, gracias a que lo salvaron pude sacarle los posibles lugares donde Hisashi te tenía.
Izuku se quedó en silencio unos segundos — Tomura fue parte de todo el plan, ¿Qué piensas hacer con él?

—Haré que me entregue su zona y todo lo que tiene si quiere vivir, gracias a la traición de Hisashi Tomura perdió y ahora controlar su organización.

Izuku frunció el ceño — Quiero hablar con él — ordenó con la mirada de póker que solía usar

—Bien, vamos entonces.

Ambos salieron de la habitación rumbo a la enfermería, pero antes de llegar se encontraron con Sero

—Deku, me da gusto que estes bien — se acercó a él — toma — Le dio una caja de analgésicos — con esto te sentirás mejor pronto

—Gracias, Cellophane — respondió tomando la caja — De hecho, me gustaría hablar contigo de algo relacionado a la sustancia que Dabi me inyecto

—Claro, gracias a Eijiro tengo una gran cantidad de muestra que voy a poder analizar

—¿Red Riot?

—Sí, me lo trajo en la noche luego de quemar la mansión

Izuku asintió, no se le había ocurrido pedir que analizaran la sustancia donde Hisashi lo sumergido, pero agradecía que Eijiro haya pensado en eso.

—¿Iban a la enfermería?

—Sí, mi omega quiere hablar con el bastardo de Tomura — respondió Katsuki

Izuku nuevamente gruño — Deja de decir que soy tu omega — No le habia dado el permiso para que le hablara así pero el alfa parecía no entender

Katsuki como siempre lo ignoro y solo sonrió de lado

—Tomura fue llevado al área de juegos en el sótano

Ambos asienten y se dirigen al sótano, donde Tomura ahora está atado en una maquina tipo T, pero no está sometido a nada, levanta la mirada cuando escucha la puerta ser abierta.

—Parece que llegaste a tiempo, Bakugo — la voz de Tomura salía baja pero llena de odio — 

¿Cómo te encuentras Deku? ¿te divertiste con tu padre? Nada como pasar un tiempo de calidad con la familia, ¿no crees?

Katsuki gruñó al escuchar las palabras de Tomura, pero se obligó a mantener la calma, este no era el momento de perder el control, en lugar de responder, dejó que Izuku tomara la iniciativa, después de todo, era su derecho.

—Dime porque el bastardo de Hisashi se alió contigo — exigió con su semblante frio, su mirada era la misma mirada siniestra que vio Hisashi el día anterior.

Tomura tembló, ese omega tenía algo y sumado a que estaba con Bakugo sabía que estaba perdido.

—No te diré nada a menos que me dejen vivir

—Un trato justo, si logras satisfacer mis dudas — respondió Izuku — Comienza a cantar pajarito

Tomura se rio entre dientes, a pesar de su estado todavía intentaba mantener su actitud indiferente.

— Hisashi me prometió algo que, para él, parecía insignificante, pero para mí era invaluable — comenzó a decir, mirando a Izuku con una mezcla de burla y odio — Me dijo que, si lo ayudaba a capturarte, podría quedarme contigo, eso era todo lo que yo necesitaba, desde que vi tu foto no pude... — El gruñido gutural de Katsuki lo detuvo no iba a escuchar esas cosas de parte de 

Tomura, así que este último omitió lo que iba a decir —A cambio, él obtendría lo que realmentezquería, deshacerse de ti y poder cobrar el seguro de vida de los tres y la herencia de la familia Midoriya que está a tu nombre.

Tomura soltó una carcajada al ver el semblante serio de los dos

—Tu padre siempre fue un hombre avaro, no podía soportar la idea de que tú, tu hermano o tu madre tuvieran algo que él no pudiera controlar, con su muerte, él podía cobrar el seguro de vida de ustedes tres, además, estaba el testamento de tu madre. Tú eres el heredero universal de todo, pero si desaparecías, nadie podría hacer uso de esa fortuna, solo aquel nombre escrito en el papel o todo quedaba congelado por los próximos cincuenta años.

Izuku supo que su madre había sido inteligente y cuidadosa con sus pertenencias, pero nunca imaginó que Hisashi hubiera planeado algo tan retorcido.

— ¿Dónde están esos documentos?

— Los documentos están escondidos en un lugar que nadie esperaría. En la tumba de Inko... pero en la verdadera, no en la que solo está una caja vacía. La verdadera ubicación de los restos de tu madre, y también de Yamikumo, está en otro lado. Katsuki, sintió la tensión de su omega, asi que dio un paso adelante, tenía que intervenir.

— ¿Dónde están los verdaderos cuerpos? — Exigió con un tono bajo lleno de autoridad.

Tomura miró a Bakugo, disfrutaba su pequeño momento de poder, después de todo parecería en ese lugar, era su condena por confiar en Hisashi.

— Los cuerpos están enterrados en un lugar fuera de la ciudad, en una propiedad alejada que pertenece a tu familia — confesó observando a Izuku — Hisashi lo hizo para evitar que cualquier investigación pudiera encontrar algo sospechoso, si quieren los documentos y darse cuenta que mis palabras son ciertas, tendrán que ir allí.