Creppy Show - Hyunlix.

Psiquiátrico.

— ¿Por qué sigues viniendo? —la pregunta callo mientras miraba una vez más la pulsera en su muñeca, allí estaba su nombre, el único contacto que tenía con quien solía ser.

—No vengo. Tú me traes aquí a diario.

— ¿Por qué?

—Culpa. Aunque no deberías sentirla, yo no te culpo —sonrió brillantemente, tanto que casi le lastimaba los ojos. —Deberías dejarme ir.

—Aunque pretendo que no... me gusta verte. Eres lo único que me queda Yongbokie. Todos los demás me abandonaron.

—Están enojados, algún día lo comprenderán. No quisiste hacerlo.

Pero Hyunjin no recordaba que era lo que había hecho, solo podía visualizar esas malditas cuatro paredes y las ventanas con barrotes. Era sacado de esa habitación dos veces por día y lograba pintar un poco, pero todos y cada uno de los cuadros eran lo mismo, el rostro del rubio pecoso frente a él.

— ¿Qué hice?

—Es mejor que no lo sepas.

—Necesito saber... ¿qué te hice?

La conversación es interrumpida por la puerta abriéndose, el mismo carrito de todos los días siendo llevado por aquella mujer de pelo negro que lo mira con lastima, entonces le dan un pequeño vaso con tres píldoras de colores.

—Tus dulces corazón.

— ¿Por qué me das dulces?

—Para que olvides.

— ¿Olvidar que?

—Que asesinaste a tu novio.

La mujer sonríe y se retira de la habitación dejando caer la bomba que todas las semanas dejan caer sobre Hyunjin. Un hombre aparentemente tranquilo pero obsesionado con su novio, al pensar que le estaba siendo infiel lo asesino a sangre fría solo para enterarse luego de que le estaban preparando una fiesta sorpresa.

Esa es la vida de Hyunjin ahora, viendo todos los días el fantasma del hombre que amaba y siendo obligado a olvidar lo que le había hecho en nombre de ese mismo amor.

Fin.

Nota: Se que aun les debo algunos One shot, pero espero ya mañana quedar al día.