Your body and my body

Capitulo 11

Jungkook.

Lo había estado pensando seriamente, no entendía el por qué Lalisa había ido a buscarme y recibí un sermón de Rosé porque supuestamente yo llevaba mis putas al apartamento. Tuve que explicarle que todo era un malentendido, aunque no le confese que en realidad esa alumna que había visitado mi apartamento me traía fascinado desde que la vi por primera vez.

La arrastré hasta el aula de la otra vez y comencé por reclamarle sobre su visita, se mordió su labio sexualmente como siempre lo hacía antes de responderme.

Empiezo a pensar que lo hace por excitarme o solo es costumbre.

— Profesor Jungkook, sé que es confuso pero le puede jurar que buscaba a otra persona —Suplico con un brillo en sus ojos, obviamente no le creí nada. Me crucé de brazos y arqueé mi ceja.

— No le creo nada de lo que dice, señorita Lalisa —Conteste molesto, entonces ella suspiró.

— No puedo jurar más, jurar es malo —Me dice haciendo un puchero, y me nacen ganas de besarla. Entonces me muestro más duro con ella, y no solo mi rostro...

— Jurar es malo si lo haces en vano, Lalisa —Mascullo, entonces ella desvía la mirada.— Ya estás descubierta Lalisa, no te esfuerces más por mentir.

— Bien, ¿Qué específicamente quiere que le diga? —Se rinde volviendo a mirarme, pero está vez con frustración en su mirada.

— Por qué estaba buscándome en mi apartamento ayer —Le contesté, ella solo se encogió de hombros.— Quiero una respuesta bien argumentada y con razones claras que pueda justificar —Ordene, ella estaba boquiabierta.

— No entendí un trabajo, buscaba orientación para resolverlo, ¿Bien? —La peor excusa del mundo, Manobal.

— No quiero molestarme y desconfiar en usted, señorita. Estoy tratando de ser amable y pasivo —Advierto haciéndome el molesto, ella suspira.

— Profesor Jungkook —Parece que estaba dispuesta a decirme, pero se arrepiente a último momento.— Olvídelo, tampoco sé porqué fui. Tal vez, me fume una muy verde y por eso lo hice, perdóneme si lo interrumpí, no era mi intención —Se disculpa mientras hace reverencias saliendo del aula y no la pude detener.

Entonces ya a la hora de la salida, cuando salí al estacionamiento no la ví con las demás amigas suyas, entonces acomodé mi moto.

— ¡Hola, profe Jungkook!

Miré a mis espaldas a Jennie con su mochila colgada de un solo hombro y una sonrisa de oreja a oreja.

— Hola alumna Jennie —Salude sin tomarle importancia, entonces Jennie sonrió.

— No es por molestarlo, pero... —Murmura tímida— Su amigo Taehyung me escribió por Instagram, y me pidió que le dijera a usted que estaría muy ocupado y por eso no puede hablar contigo —Dice. Entonces volteo los ojos.

Maldito, ¿Cree que tan fácilmente se puede librar de mis órdenes?, maldito inservible.

— Gracias, alumna Jennie.

Ella asiente y se encamina hacia sus amigas, entonces veo llegar a Lisa con una rubia nueva. Roseanne Park, becada.

Se ha hecho dos trenzas en su cabello, las dos adornan cada uno de sus hombros y su flequillo también está muy brillante hoy, el sol lo hace relucir.

De pronto se le acerca un chico y le pasa su teléfono, ella le chatea algo y el chico se va sonriendo, entonces frunzo el ceño.

— ¡Vaya, Lisa! —Exclama Suzy— Quisiera ser como tú, traes loca a media población masculina.

Es cierto, pero por su belleza es innegable.

Ella asiente, noto su incomodidad, noto que es muy humilde y noble, no pertenece a ese grupo si hablan de personalidades. Lalisa camina hacia mí, entonces me sacó el teléfono para improvisar.

Llega a mi frente y me mira curiosa, guardo mi teléfono en el bolsillo y levantó la cabeza para verla.

— ¿Puedo hablar con usted, profe? —Me pregunta, asiento y ella aclara su garganta.— Lo que pasa es que Rosé no entiende ese tema que usted nos explicó hace unos días, ¿Usted podría explicarle a ella? —Me consulta.

— Está bien.

— Gracias, profesor. Usted es muy amab-

— ¡Te amo, Lalisa! ¡Quiero que seas mi mujer, hermosa! —Lisa se queda perpleja cuando un estudiante le gritó aquello mientras se iba en la parte trasera de un carro. Todos rieron y Lisa se puso tan roja que sonríe, porqué se veía tan tierna. Pero tan pronto caí en cuenta lo que le había dicho ese inútil me puse serio.

— No es nada, Lisa.

Ella frunce el ceño, yo me doy la vuelta para colocarme el casco y ella solo suspira y se va.

***

Pasaron un par de semanas, semanas donde mi puta vida fue un desastre, mi hermana volvió a desaparecer y mis amigos también.

La última vez que Yoongi me sacó de la casa, vimos a Lalisa con ese idiota de aquella vez conversando en una cafetería. Claro que me dió rabia. ¿Que me había hecho esa niñita para que estuviera así?

No voy a negar que me cogí a unas cuantas mujeres en las discotecas, pero no fueron ni muchas ni tampoco las suficientes para llenar el vacío que sentía.

Cuando volví un Miércoles a la universidad, resultó que Lalisa supuestamente era novia del inútil de Bang Chan, pero eran rumores. Ji Eun estaba enferma y Nancy resultó embarazada. Dios, cuánta información y solo falté tres días a mi trabajo.

Obvio me estaba muriendo de celos, nomás de ver su brazo rodear la cintura de Lisa en los descansos, incluso su cuello en la cafetería y como era de "humilde" y le compraba lo que quisiera a sus amigas y más a ella.

En mi casa, fui recibido por Taehyung que llegó a contarme qué hace semanas estaba hablando con Jennie Kim. No le dije nada, Jennie es una mujer linda y parece muy madura.

De pronto soltó:

— Viene vía para acá.

— ¡¿Que?! —Solté, él sonrió y luego dice:

— Lo que pasa es que su madre la tiene estresada, entonces la invité porqué tú casa es la mía —Creo que mi cara lo desanima y cambia de tema.— Mmm... ¿Haz visto lo distante que ha estado Jimin?

— ¿Desde cuándo mi casa es la tuya? —Continue, él seguía insistiendo con lo de Jimin hasta que se rindió.

— Bien, bien. Lo lamento, no debí invitarla a tu casa sin tu autorización —Me dice, entonces asiento.— Ahora contesta, ¿Sabes algo de Jimin?

— No, ha estado igual que Roseanne... pérdidos —Comente, Taehyung sonríe pícaro y no entiendo por qué. Hasta que caigo en cuenta.

Rosé y Jimin pérdidos juntos, no contestan ninguno y se perdieron el mismo día...

— Maldito pervertido de Jimin, lo mataré. Le dije que lo quería a kilómetros de mi hermana —Masculle enojado, Taehyung río.

— Lo prohibido es lo que más atrae, Jungkook —Comenta. Y bueno sí, tiene toda su razón. Lo prohibido es lo más atractivo y llamativo que existe en el mundo.

Cuando la puerta se toca tres veces, fulmine a Taehyung y fui a abrir... Y Dios Santo, que buena está...

Ese vestido, maldición...