Capítulo 1: ¿Qué es esto que siento?

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Me encontraba en el salón de clases guardando mis cuadernos, pues, ya era hora del almuerzo. Salí del salón para irme directo a la asotea de la escuela dónde me encontraría con mi mejor amigo, Jotaro. Tomé asiento al lado de el y empezamos a comer, yo lleve un bento normal, pero el llevó unos ricos sandwiches... bueno, se veían ricos.
— Jotaro-kun... ¿Puedo probar un poco de tu comida? -le pregunte un poco apenado acercandome a el.
— Claro, Kakyoin, sabes que siempre te dare lo que quieras siempre y cuando me lo pidas, ahora, abre la boca — me acerqué a su comida y le di un gran mordisco, en eso, le mordí un dedo por accidente.
— ¡K-kakyoin! — exclamó con sorpresa, se notaba un leve rubor en sus mejillas.
Terminé de comer y agarré su mano, para darle un pequeño beso en su dedo herido, podía notar como Jotaro se sonrojaba con cada beso que le daba a su dedo. Me acerqué a el y le dí un beso en la mejilla en señal de disculpa... pero... él se acercó más a mi sin quitarme la mirada, eso hizo que me pusiera muy, muy rojo.
— Nori... tienes un pedazo de pan cerca del labio, deja te lo quito — acercó su rostro mas al mio y lamió ese pedazo de pan que se encontraba en mi labio inferior, no pude evitar quedar aún más rojo.
Me dí la vuelta y no quise verlo a los ojos; sonó el timbre para regresar a las aulas, me levanto y recojo nuestros trastes y basura, a lo cual el me ayuda a tirarla. Me agarra de la mano cómo siempre para bajar las escaleras e irnos al salón.

La clase de matemáticas estaba empezando, vaya, es muy aburrida, pero gracias a Jotaro que me ayuda en lo que no entiendo y me have reír cuando me explica, me la paso muy, muy bien. Al terminar la clase, me acerqué a su lugar desolado, pues el había ido al baño, le dejé una pequeña cartita... bueno, en ella solo le puse un 《te quiero》.
Regresó del baño y agarro la cartita, yo solo me tapaba la cara por la pena con unos de mis cuadernos... que para colmo, tenían dibujos de él que hice en mis ratos libres. Siento como una gran mano me toca el hombro y otra quitándome el cuaderno.
— Yo también te quiero, Kakyoin-kun — dice Jotato susurrando en mi oido, para luego darme un besito en la nariz.
— Jotaro... yo... ¿me acompañarías a mi casa a la hora de la salida? — dije un poco apenado, pues, ya mero era dicha hora.
El me sonrió y con el dedo dijo que sí. Sonó el timbre y ambos fuimos a la puerta de ls escuela, lo tomé de la mano y así nos fuimos a mi casa, platicando y riendo como los jóvenes que aún somos.
— Listo, Nori, ya estamos en tu casa... — me dijo con una gran sonrisa en su rostro, para luego acercarse a mi y plantarme un beso en los labios, tapándo nuestras caras con su mochila. — nos vemos mañana, Nori-kun.
— A-adiós... — dije mientras el se despegaba de mí y se iba, sonriendo un poco sonrojado.
Entré rápido a mi casa, solo escucho como mi madre me saluda, pero la ignoro y voy directo a mi habitación. ¡No lo puedo creer! Jotaro me beso... mi primer beso... ¡con la persona que mas quiero y admiro en este mundo! Me acuesto en mi cama y sacó el celular para checar la hora, a lo cual, me llega un mensaje de él...
《Kakyoin, gracias por todo, me divertí mucho contigo de camino a casa como siempre... necesito hablar contigo a la hora del almuerzo mañana, en el lugar de siempre. Te quiero.》
Me sonrojé aun más y le respondí
《Igual, gracias por todo, Jojo. Esperare ansioso a la hora del almuerzo para saber lo que me dirás ^_^ yo también te quiero ♡》
Así nos la pasamos enviandomos e-mails toda esa noche. El sueño me ganó y me quede así, en los brazos de Morfeo esperando a que el mañana llegue.

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