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Izuku terminaba su ronda de trabajo con mucho éxito, estaba alegre por llegar a casa y ver a su pareja, Oh, Izuku amaba con una locura extrema a su pareja.
Su lindo y adorado, Katsuki o como el le apodo "Kacchan".
Kacchan era para Izuku cómo respirar aire puro y fresco, era simplemente magico y adorable.
—¡Midoriya! —la voz de Shoto lo distrajo de sus pensamientos, sonriendo volteo a ver a su mejor amigo, pero al verlo agitado algo en el se encendió.
—Todoroki, ¿hubo algún problema con el papeleo? —lo miro con preocupación ya que este parecía haber corrido una maratón, el chico bicolor tomaba bocanadas de aire para poder recuperarse— ¿Esta todo bien? —Izuku ni entendía nada, y empezó a rebuscar su botella de agua en la maleta que cargaba. Se la ofreció a Todoroki, quien suspiro y comenzó a beber agua a montones. Cuando termino soltó un gran jadeo y le agradeció con la mirada.
—Izuku, la gerente quiere verte antes de que te vayas. —le informó y Izuku blanqueo los ojos, el solo quería irse a casa y estar con Kacchan.— Se que ya termino tu turno, pero aun así, dijo que solo tomaría diez minutos como máximo.
Le agradeció a Shoto por informarle y camino para tomar el ascensor con la vos de Shoto de fondo despidiéndose, Izuku levanto la mano en señal de despedida antes de subir al ascensor y tomar el número mas alto directo a la oficina de su gerente.
Al llegar al piso la secretaria lo saludo con una sonrisa y le dijo que podía pasar directo a la oficina, toco la puerta y la abrió al segundo después de escuchar un pase.
—¡Ooh, Midoriya! Estuve preguntando por ti me alegra que vinieras hoy. La información veras es...
Izuku solo sonrió mientras lloraba internamente, su gerente evidentemente tomaría mas de diez minutos.
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Al salir de edificio y fijarse qué había pasado una hora se deprimió y enojo, Katsuki seguramente lo mataría, se dirigió a los estacionamientos mientras sacaba su teléfono para textearle a su amado.
Se fijo que la última conexión había sido hace exactamente una hora, y que al parecer le había dejado dos mensajes, Izuku maldijo la costumbre qué tenía de tener el teléfono en silencio para trabajar.
Reviso los mensajes, maldiciendo aún mas al leer el "Te espero para cenar, Izu" y treinta minutos después habia enviado un "¿Deku?" junto un emoji enojado. Se iba a apresurar al marcarle y mientras buscaba las llaves del auto cuando de la nada una persona lo abrazo por detrás.
Y el sin dudas reconocería esa loción, esa fragancia a frutillas del shampoo y esa altura que lo complementaba tan bien. Soltó todas las cosas sin importarle si se podrían estropear mientras se giraba para sostener a su Kacchan.
—¡Izu! ¡Bastardo! —sus mejillas se sonrojaron al oír su preciosa voz llamándolo.
—Kacchan, Oh Dios, te extrañe tanto en esta jornada. —Izuku hablo mientras lo abrazaba mas fuerte, Katsuki suprimió su enojo al sentir como Izuku realmente lo abrazaba super fuerte, las mejillas del mas bajito se tornaron de un tierno rosadito.
—Ya suéltame... Deku. —su voz salió suavecita mientras se ponía aun mas rojito. Izuku no planeaba soltarlo.
—Quedémonos solo un ratito mas así. —Izuku sonrió cuando noto lo sonrojado que estaba Katsuki mientras este último solo le miraba mal, y se resignaba a dejarse ser.
Su amor era tan lindo con el.
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