Era un sábado por la tarde, Juls y yo estábamos en la sala de nuestra casa viendo nuestros teléfonos, Juls estaba recostada boca abajo en el sillón pequeño junto a la ventana, parecía estar viendo una página de bolsos mientras tarareaba una canción en voz baja, yo en cambio estaba en el sillón largo con mis piernas encima de el respaldo de este, mi cuerpo sobre la base y mi cabeza casi tocando la alfombra peluda que había debajo, mi cabello estaba alborotado, estaba viendo instagram, nada interesante a decir verdad; suspire y deje mi teléfono a un lado en la alfombra, mire de reojo a Juls quien parecía estar muy concentrada en su catálogo de bolsos caros; suspire de nuevo para que Juls me volteara a ver y fui ignorada por completo, “que linda, me ignora”, voltee la cara y la mire de nuevo, estaba con una ceja fruncida, sus dedos tocando sus labios dudosa.
- Están tan caros que sigues buscando el más barato? - bromee.
- Esta vez sí me volveré a ver con mala cara.
- Aay si, sobre todo… - respondió de la misma forma, burlona.
- ¿No quieres salir?, ya me aburri de estar aquí - hice cara de sufrimiento.
- ¿A dónde?, son las 4 apenas, no hay nada que haga que salga a esta hora.
- ¿Ni siquiera ir de compras? - pregunte aun en tono burlón, sabiendo lo que respondería.
- Bueno si lo dices así… es algo diferente, ¿no?
Reí ante la obvia contestación de Juls, me di vuelta y caí completamente de cabeza sobre la alfombra, tomé mi teléfono y me levanté.
- Bien, vístete.
Una pequeña risita salió de los labios de Juls, rei después. Entre a mi habitación y tome una ducha rápida, planche mi cabello y me arregle para salir al centro comercial para ir de compras con Juls; después de un rato ambas ya estábamos listas, salí a la sala y ella estaba aplicando un poco de gloss en sus labios mirándose en el espejo de el corredor, mientras tomaba las llaves de mi carro, mi cartera y las llaves de la casa.
- ¿Lista?
Juls asintió acomodando su oscuro cabello por encima de sus hombros, “bien” dije en voz baja mientras la esperaba fuera de la casa, ambas salimos y entramos al mi “SEAT Ibiza” color blanco, muy lindo por cierto.
Comencé a manejar hacia el centro comercial y ella puso la música, mientras iba conduciendo, ambas cantábamos divertidas. Al llegar estacione mi auto en el “mejor” lugar de estacionamiento techado.
Entramos y comenzamos a recorrer tienda por tienda, a ambas nos encanta ir de compras así que no era algo aburrido para nosotras; vimos bolsas, pantalones, vestidos y maquillaje, Juls se compró un par de botas blancas con tacón y una falda floreada color azul cielo con un estampado de flores, muy linda la verdad, yo solo he comprado una base de maquillaje que me había hecho falta y un vestido que vi muy lindo, un vestido algo pegado pero con olanes, color como cafe, que combina perfectamente con un saco con orilla de piel que tengo en mi armario.
Después de un rato nos sentamos en un café a descansar.
- ¿Qué quieres?Café, té, helado…
- Un latte - me interrumpió.
- ¿Nada más señorita? - dije burlona.
- Ummm, una galleta, de avena… con chispas de chocolate - sonrió.
- Tonta - dije en burla, volteé los ojos y me acerqué a hacer el pedido.
Me formé en la fila y cuando fue mi turno me atendió un lindo chico de aproximadamente unos 17 años, era de tez blanca, cabello café claro y sus ojos color hazel eran lindo, me sonrió y me tomó la orden.
- Un latte, un café espresso y dos galletas de avena con chispas de chocolate, por favor - dije amable.
Tomó mi orden, asintió y entró en la cocina para dejar el pedido en preparación, “cuando esté listo la llamaré…” dijo esperando mi nombre.
- Zoe.
“Bien, le avisaré cuando esté listo su pedido Zoe” Sonrió tiernamente y asentí. Fui a la mesa junto a Juls, su vista estaba perdida, inédita, “vaya bien” pensé.
- Dios Zoe, ¿hablaste con ese lindo chico?, ¿cómo se llama?, ¿no será muy menor?
- Juls! - Rei - es un niño apenas, además es el mesero ¿que cosas dices?
- Pero está lindo!, o me dirás que miento - hizo una expresión de enojo dudoso en broma.
- Rei de nuevo - Si Juls, es lindo pero por dios es un pequeño aun.
Me senté frente a ella en la mesa y continuamos platicando, después de un rato dijeron mi nombre, voltee y el lindo chico estaba haciéndome seña con su brazo mientras me llamaba. Me levante y camine hacia él, me miraba desde que estaba sentada en mi mesa junto a Juls hasta que llegué a estar justo enfrente de él, me sonrió tiernamente, solo el verlo daban ganas de abrazarlo y mimarlo como si fuera un niño pequeño, encendía ese instinto maternal. Reí para mí misma, tome el pedido y agradecí al lindo chico dejando un cumplido sobre sus lindos ojos, me volví a con Juls en la mesa y continuamos platicando, después de un rato nos fuimos a casa, tome una ducha rápida, salí a la sala y busque a Juls por la casa, me asome en su habitación y estaba dormida, cerré y apague las luces de la casa y me acosté en mi cama, Mochi subió a mi cama y se recostó junto a mi, lo amaba, él siempre había estado conmigo, acaricie sus peludas orejas y se recostó junto a mí ronroneando levemente.
- Gatito tonto - dije levemente.
Encendí la televisión y puse algo de música de fondo poco después me había quedado dormida.
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𝓛𝓸 𝓹𝓮𝓻𝓯𝓮𝓬𝓽𝓸 𝓮𝓷𝓽𝓻𝓮 𝓽𝓾 𝔂 𝔂𝓸
Teen FictionZoe, una linda chica que vive junto a su mejor amiga en la universidad, pasando por pasados oscuros y no tan buenos, sintiendo que no puede querer a alguien, ni relacionarse con alguien en el aspecto amoroso, ¿Podría ella conseguir el amor sin salir...