Capítulo 42

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Narradora omnisciente

   Los días pasaban y todo seguía exactamente igual entre Newt y Alex. Parece que en el área es difícil arreglar las cosas hablando.

   El pelirrojo había estado centrado únicamente en su trabajo, iba al laberinto, llegaba e iba a la sala de mapas, luego se duchaba, cenaba y dormía. Esa era la rutina que había implementado.

   Por otra parte, el rubio estaba más callado de lo usual, solo hablaba lo necesario para no levantar sospechas y pregunten la razón de su actitud distante.

   La situación con Marcus quedó en el olvido, él no recordaba nada de lo que ocurrió esa noche y para Alex fue un alivio porque siendo sinceros, eso ayudaba a liberar algo tensión cuando llegaba la noche y ya no se sentía incómodo desearse las buenas noches ya que sus hamacas están una al lado de la otra.

   La pelinegra observaba de lejos a su amigo. Estaba realmente preocupada por verlo tan retraído, tan apagado y lo peor de todo es que haya sido por sus estúpidas insinuaciones de querer hacerse la cupido y acercar a sus amigos.

   Dejando de lado esa situación, nadie parecía sospechar sobre las actitudes de ambos. Por parte de Alex, atribuyeron su decaída por el laberinto. No era algo inusual que los corredores anduvieran de mal humor o sin ganas de siquiera hablar. En cambio, con Newt pasaba por lo de su accidente, creyeron que su cabeza estaba sumida en algo parecido.

   El líder mostró su apoyo, pero claro, el rubio no iba a revelarle la verdadera razón de su falta de alegría.

...

   El pecoso estaba saliendo de las duchas cuando se topó de frente con alguien. Quiso pasar por su lado y evitarlo a toda costa, pero eso no iba pasar.

—no puedes evitarme para siempre —gruñó Newt. El pecoso frunció el ceño

—claro que puedo —ahora era el rubio quien juntó sus cejas

—¿por qué estás enojado?.. soy yo quien debería estarlo, tu me besaste.

   Esas palabras le cayeron como un balde agua helada al pecoso. Newt se arrepintió apenas terminó de hablar, y lo hizo al ver como el rostro del pelirrojo se suavizaba.

—dije que lo sentía —murmuró avergonzado. El rubio tragó saliva

—lo sé... yo solo... quería saber si estamos bien.

   Decir que eso decepcionó a Alex era poco. Creía que el fin de esta conversación sería con otro significado, pero al parecer el rubio no quería ceder a sus emociones.

—¿solo eso?.. —Newt asintió dudoso —... okey.. si estamos bien -

—.. genial... ¿amigos? —estiró su mano, pero el pecoso lo único que vio en su mano fue una sentencia de por vida a tener que tomar sus sentimientos y enterrarlos en el cementerio del área.

   Miró al rubio y ese brillo que había visto aquella noche, estaba allí. Era extraño que él estuviera estirando su mano, pidiendo su amistad, cuando sus ojos brillaban de esa manera. ¿Acaso le brillan los ojos con cualquiera?.

   El corazón del rubio le latía con rapidez. El rostro del pecoso se veía distinto a cómo siempre. Detestaba el hecho de ser él, él culpable de la tristeza del chico. Ser la razón por la que había dejado de ser tan ruidoso en la cena o la razón de que su sonrisa solo sea para que no le pregunten si no entendió un chiste.

   Tomó una bocanada de aire y con un nudo en la garganta respondió.

—estamos bien.. pero no creo que ser amigos esté bien.

I'm going to find them [GallyxTnxMinho] correr o morirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora