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Rohus:

Cuando Simón se fue, me dirigí a la sala norte, una pequeña sala de estilo rústico, en un sillón individual encontré a Bady, jugando con pequeña pelota de hule, junto a Moon, una perrita de raza Golden, me senté en el apoya brazos y jugué con ellos.

Mire la hora en el reloj

10:05 pm

Suspiré y fui a la cocina, agarre un bote de helado de chocolate del refrigerador y fui a mi habitación, me puse mi pijama y me acosté y acomode en mi cama, agarrando el control del tv y entrando a Netflix y empeze a ver una película, "A dos metros de ti".

Comi helado mientras veía la película, y a la mitad de esta, me mandaron mensajes, viendo por la pantalla pude ver el nombre de quien era, mi amiga, Xiomara.

¿Qué vas a hacer mañana?

                                                ¿A qué hora?

A las 9am

                                    Pues...nada, dormir

¿Hacemos desayuno en tu casa?

Está bien, me avisas a la hora que llegas a mi casa.

Ok, bye

                                                                Bye

Al terminar la película deje sobre mi mesa de noche el bote vacío de helado y me volví a acomodar para dormir

Al despertar encontré a Bady encima mío, sonreí y lo baje, yo también me levanté, fui a lavarme la cara y los dientes, haciendo skincare, escuchando música, Artic Monkeys, cuando termine me volví a acostar a mi cama, pero sin taparme, mirando mi teléfono, de vez en cuando miraba por las ventanas y la puerta corrediza el paisaje, era un día soleado, caluroso.

Un caluroso día de verano.

-señorita, la joven Xiomara se encuentra en la cocina y su padre hace unas horas viajo- informó Alexa.

-¿Viajo? ¿A dónde?

-a Francia señorita, dijo que iba por negocios, disculpe, pero no sé nada más.

-ya veo...está bien, dile a Xiomara que en un momento bajo.

Sin más, Alexa se fue, dejándome sola en esa gran habitación.

Viajó, otra vez...sin mas, ni siquiera se despidió.

Suspiré y salí de mi habitación, bajando a la cocina, encontrándome a Xiomara, sacando muchos productos de una bolsa, al parecer había pasado por un supermercado.

-¿Qué trajiste?- pregunté mientras veía lo que sacaba y tome una Nutella, abriéndola con un cuchillo y con una cucharita comiendo la crema de cacao.

-eres muy plagosa- respondió y yo reí.

-no te preocupes aquí hay más.

Seguí comiendo mientras veía como ella ordenaba y sacaba de todos lados de la cocina lo que íbamos...o bueno, iba a usar, yo solo iba a mirar, comer y agarrar las mezclas de su comida.

-¿Qué vas a cocinar?- hable cuando ví que ella ya tenía todo sobre el bar de azulejos blancos.

-haremos... retracto, haré galletas, panqueques, enchiladas, y más comida.

-¿Enchiladas?, ¿Desde cuándo sabes hacer comida mexicana?

-desde siempre, tengo familia de México y me enseñaron, ahora cállate y no te quejes.

-ok, hoy amaneciste productiva.

-no, pero si con hambre.

Rei y agarre pan blanco, comiendo con la Nutella.

-no comas, te vas a llenar.

La mire con una ceja levantada y seguía comiendo el pan con la Nutella.

-me había olvidado que tú tienes estómago de camionero.

Rei y seguí comiendo mientras seguía a Xiomara por toda la cocina, mientras le hablaba de cualquier cosa que se me venía a la mente.

-¿Qué pasó con eso del matrimonio?- hablo por fin.

-tuve que aceptar.

-¿Te gusta?

-pues...no, pero lo consideraría un amigo.

-¿Qué pasó con lo que siempre decías? Con eso de "el amor verdadero"

-nada, aún sigo creyendo en eso, pero...no lo sé, tuve que aceptar, no quería ver a mi padre triste o enojado conmigo.

O tal vez no querías decepcionar a todos Rohus.

-te apoyo en todo y lo sabes, pero no es "un amigo" se va a convertir en tu esposo.

-si, pero...sin embargo no...no podía decir que no.

-bueno pues...te apoyo, ¿Has hablado con él?

-si, tuvimos....algo así como una conversación de kinder y tuvimos una cita en el centro comercial, me compró prácticamente todo lo que tocaba.

Ella me miró y rio, hice lo mismo.

Al terminar de cocinar, los sirvientes llevaron todo al comedor, y arreglaron la mesa, nos sentamos y comimos, hablando de cualquier cosa, películas, series, ropa, maquillaje, etc.

Al terminar, los sirvientes limpiaron la mesa y la cocina, que por cierto estaba un desastre, y fuimos a mi habitación, yo fui a mi cama y ella, como siempre hacia, iba corriendo hacia mis mascotas, jugando con ellas, mientras yo sonreí o grababa.

La Propuesta Del Mafioso #1 Sangre Y Amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora