El legado del Monstruo humano

Capitulo 44:¡El Campamento Inicia!

Luego del agitado sábado, la clase A opto por tener un domingo en paz y calma, aunque claro, para el peliverde y la rubia americana no tenían la misma idea. Comentaron a medias lo que paso en el centro comercial a Bang, y este por supuesto hizo lo que cualquier adulto responsable haría, los entrenaría hasta la muerte.

—Dime, ¿como se te ocurrió la grandiosa idea de decirle al anciano lo que ocurrió ayer?—pregunto adolorido Izuku, mientras estaba en posición de jinete

—No lo se...Sonaba bien en mi cabeza hasta que lo dije—comento de la misma forma Melissa

En si la posición de jinete no era un problema el mantenerla, al fin al cabo ellos dos siempre están sujetos a entrenamientos físicos bastante elevados, por lo que simplemente ese ejercicio no seria tortuoso. Pero, si a eso le agregas dos baldes de agua en cada brazo junto a cuchillas por sus axilas para asi mantenerlos rectos y sobre el nivel de hombro, entonces si se agrega un nivel de dificultad extra

—¿C-cuanto falta?—pregunto incomoda y adolorida Melissa, miro a Bang suplicando con la mirada

El anciano estaba felizmente sentado en una reposera mientras leía un periódico, levanto la vista un minuto para ver a la chica, pero inmediatamente volvió a leer su periódico como si fuera lo mas interesante del mundo

—Veamos....llevan 2 horas, creo que una hora mas estará bien para terminar el calentamiento

Los dos al oir eso se tensaron y se maldijeron internamente, aunque Izuku se paso un poco mas de palabrotas.

[...]

Finalmente era el domingo por la noche, Melissa e Izuku estaban tirados en el suelo respirando agitadamente, el entrenamiento fue demasiado excesivo, aunque ninguno de los se quejaban en si por el entrenamiento, sabiendo que debían ser mas fuertes.

—Vamos, te acompaño a tu casa—comento Izuku, siendo el primero en recuperarse

—No hace falta

—Insisto, conociéndote te meterías en problemas

—Como si tu fueras tan diferente

—Pero al menos nos meteríamos en problemas juntos—bufo divertido, risa que compartió Melissa

Los dos caminaron hacia el departamento de la rubia, pero se desviaron un poco y se encontraron en la playa Dagobah, que si bien la limpiaron en 1 mes y algo, realmente se sentía agradable y nostálgico estar en aquella costa

—Recuerdo que la primera vez que vinimos aquí estaba lleno e basura—comento Melissa, mientras su mirada se perdía en el horizonte

—Si, y tuvimos que limpiarla antes de entrar a la U.A—comento nostálgico Izuku, siguiendo la mirada de Melissa hacia el horizonte

Los dos jóvenes se mantuvieron parados ahí, mirando el horizonte como si fuera lo mas interesante de la vida

—¿Como lo llevas?—pregunto Izuku, Melissa parecía no saber de lo que le hablaba pero rápidamente lo supo...

—Es difícil y raro....Despertar y saber que mi padre no esta...a veces tengo pesadillas sobre eso...es realmente

—¿Extraño, no?—interrumpió Izuku, sorprendiendo a Melissa un poco—Yo...aun no tengo del todo mis recuerdos de hace 10 años...pero siempre tengo la misma pesadilla...unas sombras persiguiéndome y yo huyendo cómo un cobarde al bosque—inconscientemente, su mano empezó a temblar ligeramente—Sin embargo, desde que decidí confiar plenamente en vos y en Akame, las noches fueron mas...pacificas