Sin Querer Dejé De Odiarte [NICK & CHARLIE]

Capítulo 8

Charlie.

Mentiría si digo que no quise salir corriendo tras de él, mentiría si dijera que no quiero tenerlo cerca de mi cuando es lo único que desea todo mi ser.

Nick, estúpido Nick Nelson.

Los gritos de mi padre aturden los sentidos pero no le presto atención, mi mente está pensando en él.

― ¿Acaso estás escuchando lo que te digo?.

― Papá, si no he respondido es porque no lo estoy haciendo, ¿Que quieres de mi?.

― ¡Que te comportes como un adolescente normal!.

― ¿Normal, dices? Llamas a tus órdenes y reglas, ¿Un comportamiento normal? Déjame vivir mi vida como yo quiero.

― Dañas la imagen de la familia que hemos construido por muchos años con tus escándalos.

― Será tu imagen, porque es la única que te importa.

― Te pedí que te hicieras amigo de Nicholas por las buenas, no quieres y vas a hacer todo este circo.

Mis dedos pasan por los mechones de mi cabello tratando de liberar el estrés que me genera hablar con el.

― Te quedan solo unos días en esta escuela antes de la graduación, no quiero tener que venir de nuevo.

― ¿Acaso alguna vez te ha importado lo que  quiero? Siempre has manejado mi vida a tu antojo, la política esto, la política es tu futuro, solo déjame en paz.

― Escúchame con atención mocoso, quien va a seguir el legado político de la familia eres tu, no tu hermana Brianna, disfruta tus últimos días y luego irás a trabajar conmigo.

― ¡No quiero estar en este maldito mundo!. Son hipócritas, nunca te ha importado nada más que llenarte los bolsillos de dinero.

― Cada político maneja su gobierno a su antojo, corrupto no soy, hago bien mi trabajo, no más escándalos, tu y Nick deben hacer acto de presencia en la beneficencia está noche.

― Que vaya él y que sea el centro de atención.

― No te estoy preguntando si quieres ir, vas a ir y no lo voy a repetir, ahora vámonos a la casa, tu tío Mario quiere verte.

Caminamos hacia el estacionamiento de la escuela, como siempre nos esperaba su chófer, los guardaespaldas y la enorme camioneta negra blindada y vidrios ahumados.

Papá centró su atención en su teléfono hablando con sus dirigentes y otros políticos acerca del evento de esta noche, al cual por obligación debo asistir, usar traje, corbata, una falsa sonrisa ante las cámaras no era precisamente como deseaba pasar mi noche.

Estando en casa no deseo ver a nadie, mi papá quiere hablar en el comedor con toda la familia pero no tengo animos para soportar otros regaños por parte de mi madre.

A quien tampoco le interesa mucho la vida de sus hijos, pasa el tiempo en el club con sus amigas, asistiendo a eventos con papá, uno que otro discurso ante las cámaras por ser la primera dama y nunca se toma el tiempo para saber de nosotros.

Aún no comprendo la razón por la cual Brianna se esmera en formarse en esta carrera de ciencias políticas, es muy buena oradora, amigable e inteligente, sabe cómo dirigirse a las personas, tiene mucha más presencia y tacto que mi padre.

― Charlie, ¿No vas a cenar?. ― el sereno tono de voz de mi hermana Brianna me hace girar mi cuerpo para verla, es una hermosa mujer que se empeña en obtener la aprobación de papá.