Un amor no superado puede llevar a tantas cosas... Especialmente si tras él vive el sentimiento de rencor por un rechazo.
¿Hasta dónde sería capaz de llegar en busca de venganza? O... si realmente puede llevar a cabo su plan.
Después de todo... Dond...
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La hora de buscar a los chicos había llegado por lo que Seungmin salió de la casa, Chan casi ni lo había volteado a ver cuando se despidieron y eso debido a que las horas que pasó con Seungmin en la mañana le habían retrasado el trabajo, por lo que estaba tratando de reponer el tiempo que no trabajó en la mañana antes de que Jihyo llegase, porque ella le preguntaría porqué estaba tan atrasado.
Seungmin por su parte iba con Minji en el auto, tendrían una clase al llegar a casa por lo que hablaban con normalidad, ella contándole al mayor su día y este escuchándola atentamente, haciendo comentarios y preguntas cada poco para que la conversación no muriera.
Al llegar a casa se dirigieron a la habitación de instrumentos, donde Seungmin le había enseñado un nueva técnica vocal a la chica, quien siempre se mostró muy entusiasta por aprender.
Al momento de dar el tiempo para buscar a Jake tomó la llaves y salió, Minji se había quedado en la sala viendo una serie por lo que no tenía de qué preocuparse de igual forma le hizo saber a Chan que iba a salir, pidiéndole que se mantuviera al pendiente de la niña.
El camino lo disfrutaba en silencio, pensando en el progreso con Chan y que ya en dos días sería su cumpleaños por lo que decir que no estaba nervioso era una mentira.
Yizhuo le había mandado algunos hoteles que eran románticos y bonitos que no eran lujosos ni mucho más, pero muchísimo mejores que la mierda a la que Chan solía llevarlo hacía unos años atrás.
Se aseguró de despejar su mente y llegó a la puerta de la escuela, en donde Jake salía con el mismo amigo que la vez pasada.
-Hola, Seungmin.- dijo Jake entrando al auto. El mencionado se sintió algo aliviado de que el otro no viniera.
-¿Nos vamos?- cuestionó, recibiendo sólo un asentimiento como respuesta.
El camino de regreso fue igual de silencioso que el de ida, con la diferencia de que Kim no se dejaba consumir por sus múltiples pensamientos acerca de Chan.
Al llegar a la casa ya Jihyo estaba allí, con su ligera sonrisa los recibió, dándole un beso en la frente a su hijo y haciendo preguntas a Seungmin acerca de su día.
Él sinceramente no esperó que mentir se le hiciera tan difícil, ella sólo se refería a las clases de Minji y el llevar y buscar a los chicos a la escuela. Pero por otro lado... su cargo de conciencia llegaba a ser ligeramente molesto, no demasiado como para hacerlo notar, pero sí lo suficiente como para atormentarlo.
Esa noche se aseguró de tomarse la pastilla con una botella de agua en su habitación porque sabía que Chan lo esperaba en la cocina.
Durmió al poner algo de música en su teléfono.
Al día siguiente todo fue normal y tras llegar de la escuela se sentó a desayunar solo, pues Chan estaba tomándose una ducha y Jihyo ya se había ido, subió a la habitación de instrumentos.
