Batalla por Copper 9 || [MURDER DRONES AU]

53. La decadencia de un Elliott

Ian avanzó, suficiente para acorralar a Lizzy hasta una esquina de la habitación.

—¿Vas a matarme? —dijo de forma retadora—. Creeme, si lo intentas, mi novia te parte la cara.

—Oh, no, no voy a matarte —dijo Ian, quitándose el casco y dejando que el tóxico aire de Copper 9 entrara en sus pulmones—. De hecho, tengo otros planes para ti. Me pregunto, ¿qué tan flexibles son los drones de tu tipo? —dijo de forma lujuriosa, mientras se relamía los labios.

—Eh... ¿Qué? No, un momento, para ustedes es asqueroso...

—Soy muy flexible para probar cosas nuevas...

De pronto, un rayo verde de energía atraviesa el pecho de Ian, desintegrando su corazón y dejando un enorme hueco.

—¡Alejate de ella, maldito enfermo! —le grita Uzi, sosteniendo su láser.

—¿Eso es todo? —pregunto That—. Vaya, por un momento creí que sería más...

El chico dejó de hablar cuando Ian empezó a reír. —Mis órganos arden, mi piel se quema y siento como muchos de mis huesos gotean. Sin duda, tu arma es magnífica —río, mientras empezaba a regenerarse—. Hace mucho tiempo que no sentía ese placer. Por favor, te lo suplico, disparame otra vez.

That y Lizzy estaban confundidos, ¿cómo seguía vivo? ¿y porque parecía tan complicado?

—Los guerreros reales tienen un chip en la espalda que les da una regeneración tan buena como la de los blood drones —explicó Uzi, quien no era la primera vez que veía a uno de estos sujetos—. Aun así, si destruyes el chip, ellos se deshacen, pero... No es lo mismo con Ian, nadie sabe dónde está su chip. Además... El chip también desprende hormonas de felicidad que reemplazan las del dolor. Mientras más dolor le causemos, más placer sentirá a la vez.

—Efectivamente —dijo, mientras se quitaba la armadura y el hueco se terminaba de cerrar—. Sin embargo, hace mucho tiempo que las heridas comunes ya no me hacen efecto. Me cause tanto daño que... ya no me emociona. Tu arma, es la primera de verdad que me hace sentir algo. Así que, por favor, por favor te lo pido, dispara de nuevo, es más, dejame hacerte un favor —rio, terminando de quitarle la armadura de cintura para arriba, mostrando su cuerpo perfecto y sin marcas—. Ahora sin protección

—... Oh, por... eso sonó asqueroso.

De pronto, Ian saca su espada, la cual se encontraba profundamente clavada desde su cadera hasta su pie, la cual sale cubierta de sangre que pronto se regenera.

—Haganme sentir algo, lo que sea, o ya no me sirven y me veré obligado a terminar con sus vidas, jsjs. Oh, mejor, hagamos las dos.

De inmediato, Lizzy utiliza el arma que tomó de la mochila de Uzi, un látigo de energía que le hace una clara y profunda marca en el cuerpo de Ian.

—¿Enserio? Me di tantos de esos golpes de adolecente que ya no son nada —dijo, girando y blandiendo su espada para atacar, pero entonces That lo detiene con un disparo que le revienta parte de la mandíbula—. Nada mal, pero necesito mas que eso.

Sin más opciones, los tres worker drones empezaron a disparar todas las armas de la mochila, buscando el punto débil de Ian. Sin embargo, con cada disparo solo aumentaba en placer que el Elliott sentía, quien en un punto dejo de luchar y solo dejo que lo fusilara, mientras que se lamía la sangre.

—Si, si, mas... —dijo, apoyándose en la pared—.

Los worker drones dejaron de disparar de pronto, esto era demasiado incómodo para ellos.

—Se ve distraído, vamos a destruir el...

De pronto, Ian les arrebata los nanobots. —¿Que es esto? ¿Un acido especial? Bueno, veamos que trae —dijo, comiendoselos—... Um, nada interesante, creo que me disolveria las entrañas, que decepcion.