La noche del Festival del Miedo estaba en su apogeo, y el ambiente era perfecto para la aventura que Shoto había planeado. Cuando invitó a Deku, no imaginaba que el festival despertaría emociones tan intensas en ambos. Las luces rojizas y las sombras de figuras fantasmales añadían un toque especial a cada rincón del lugar.
A medida que avanzaban por el festival, entre casas embrujadas y caminos oscuros, Deku y Shoto se encontraban cada vez más cerca. El ambiente tenebroso los empujaba a buscar apoyo en el otro; Deku, con una mezcla de emoción y nervios, no dudaba en aferrarse a la mano de Shoto cada vez que algo lo asustaba. Aunque Shoto mantenía su expresión tranquila, su corazón latía fuerte, y sus dedos entrelazados con los de Deku parecían no querer soltarse.
Al final de la noche, encontraron un rincón tranquilo, lejos de las multitudes. La luz de las calabazas y los destellos del festival creaban un ambiente cálido y privado. Allí, Shoto se armó de valor y se acercó a Deku, susurrando lo mucho que significaba para él compartir esa noche juntos. Deku, con las mejillas sonrojadas, le sonrió y, sin decir nada, se dejó llevar por el momento, acercándose aún más.
Sus labios se encontraron en un beso lleno de pasión y lujuria,Shoto bajo a el cuello del más bajo para dejar mordidas y chupetes.
Deku:¡ngh! Ahh sho-shoto aquí no-o
Shoto:podemos ir a otro lugar-dijo volviendo a besar el cuello de su acompañante
Deku:bu-eno solo no nos pueden ver si, shoto.
Shoto:esta bien.-dijo para agarrar a izuku y impulsarse al cielo y mientras volaban apretaba el culo de Izuku llegaron a un hotel y Shoto pidió una habitación,luego verían como pagarla.
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(Intento de lemon que no me sale pero intento)
Entraron en la habitación besándose con pasión y lujuria.
Deku bajo el pantalón y empezó a chupar el miembro.
ohh~ si,lo haces genial~-dijo Shoto, para jalar el cabello del peliverde y que lama hay,sacando unas cuantas lágrimas,siguieron asta que se corrió.
Shoto con algo de brusquedad tiro a Izuku en la cama,mordiendo el cuello del más bajo y dejando chupetes,sacándole la camisa para besar su pecho ,succionando.
Izuku pudo terminar de hablar cuando sintió una presión profunda en su pecho.
-Hoy serás mi conejito -dijo Shoto, sus ojos brillando con una mezcla de amor y deseo-, y como buen conejito, debes seguir mis instrucciones.
Shoto levantó tres dedos, mientras Izuku, atrapado entre la sorpresa y la curiosidad, comenzó a seguir el movimiento. De vez en cuando, Shoto introducía sus dedos más profundamente, observando con satisfacción cómo pequeñas lágrimas brotaban de los ojos de Izuku, una respuesta que lo llenaba de una extraña emoción.
Sintiendo que la conexión entre ellos se intensificaba, Shoto posicionó con cuidado el rostro de Izuku en la almohada, sintiendo cómo su corazón latía con fuerza. Al levantar suavemente las caderas de su compañero, introdujo un dedo con ternura, moviéndose en círculos mientras exploraba, cada movimiento cargado de cariño y deseo.
