⑅ 𝘿í𝙖 𝘾𝙪𝙖𝙩𝙧𝙤 🐢

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Jennie hizo una pequeña mueca mientras apretaba las sábanas debajo de su cuerpo, su ondulado cabello estaba esparcido sobre la superficie de la cómoda almohada, sus caderas estabas alzadas a disposición de aquella alfa, quien se movía dentro de el...

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Jennie hizo una pequeña mueca mientras apretaba las sábanas debajo de su cuerpo, su ondulado cabello estaba esparcido sobre la superficie de la cómoda almohada, sus caderas estabas alzadas a disposición de aquella alfa, quien se movía dentro de ella maltratando su interior. Haciéndole casi delirar de placer, no sabía como llegaron a esa situación, la verdad no tenía idea, sólo estaban por dormir una siesta y... después todo era borroso. Últimamente su novia siempre tenía ganas de hacerlo, no importaba si estaba limpiando u ordenando, tenía que dejarlo para atender a la alfa y dejar que le rompiera el culo. Y no es que se queje pero su trasero ya no podía soportarlo.

Además de tener más apetito sexual, estaba mucho más posesiva y territorial que antes, no la dejaba sola, siempre la sentaba en su regazo y no perdía la oportunidad para marcarla con su aroma o chupones, su cuello estaba lleno al igual que su pecho y muslos, de alguna forma de las ingenió para que deje de hacerlo. Le preocupaba más lo de su cuello, estuvo buscando toda la tarde remedios caseros para quitárselos, intentó con hielo, pasta dental e incluso un peine, lo cual funcionó, un poco.

Sintió como sus muñecas fueron tomadas con mucha fuerza y colocadas arriba de su cabeza, las embestidas aumentaron de velocidad y brusquedad. Mordió su labio inferior para regular sus fuertes gemidos, en la habitación se escuchaba el ruido de las pieles chocar, los jadeos de Jisoo y la inútil forma de Jennie de calmar sus gemidos.

Joder, no quería tener problemas con los vecinos otra vez. Era vergonzoso cuando tocaban la puerta y le pedían que modere el volumen.

Luego del orgasmo Jennie cayó a la cama y Jisoo a su lado después de que su nudo volviera a su tamaño normal.

- Tú... - Murmuró con cansancio - Te vas a tomar dos supresores juntos, ahora.

Jisoo la observó con esos ojos marrones y la abrazó contra su cuerpo, como si no hubiese escuchado a su omega. Jennie suspiró dejándose envolver por sus brazos y de paso dormir un rato, que eso era lo que tenía planeado desde un principio.

 Jennie suspiró dejándose envolver por sus brazos y de paso dormir un rato, que eso era lo que tenía planeado desde un principio

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Jennie
Mañana es el último día del celo de Jisoo

Si ya ahora parece una máquina de sexo insaciable COMO CARAJOS VOY A HACER MAÑANA

ME DUELE DEMASIADO EL CULO 😭

Joder

Ahora entiendo el cansancio de Jisoo cuando me cuidó :(

Tomó dos supresores y su aroma ya no es tan fuerte, pero está con fiebre

Puto celo

REALMENTE POR QUÉ NO HICISTE UN PDF COMO LO HIZO ROSÉ

Me caes mal

Me da vergüenza pedirle ayuda a Nayeon

Ok

Jisoo pudo sobrevivir una semana cuidándome sin saber una mierda, yo también puedo
Enviado a las 18:50 hrs.

Con cuidado se sentó sobre el regazo de la alfa y ambas empezaron a cenar, decidió pedir a domicilio pues en ese estado no tenía ganas de cocinar. Sólo hubo un pequeño inconveniente, el repatidor era un alfa y Jisoo al percibir el aroma de otro alfa cerca de su omega le gruñó y el chico salió desvaporido sin recibir siquiera el dinero.

Y lo mismo pasó con el helado, la repartidora era una omega, la que abrió la puerta fue Jisoo debido a que Jennie se encontraba en el baño, la repartidora al oler el celo de la pelinegra empezó a coquetear con ella importandole poco la marca de omega que tenía en su cuello. Jennie al salir del baño y ver a su alfa con el helado en las manos, se acercó y escuchó algunas cosas que no le agradaron, con una sonrisa falsa le dio el dinero y le cerró la puerta en la cara no sin antes gruñirle.

Jisoo sentía que su omega estaba molesta, pues parecía apuñalar el helado con una cuchara y más que molesta también algo celosa. No sabía por qué aquella omega empezó a coquetearle, ella tenía ojos para su omega bonita y enojona. Con cuidado, la abrazó y apoyó su mejilla en el hombro ajeno.

Jennie resopló — Esa estúpida vio tu marca, ¡marca que yo hice con mis colmillos! ¡Mis colmillos! ¡Tú ya tienes una omega! ¡Yo! ¡Jennie Ruby Jane Kim! Ya quisiera esa marcar a una alfa como tú. Maldita desubicada irrespetuosa, ella se llevaría bien con el de la tienda de pollo frito. Otro maldito desubicado irrespetuoso, ¡todos son unos malditos!

Jisoo pestañeó y comenzó a acariciar el cabello de la omega tratando de calmarla mientras seguía maldiciendo a todo lo que se movía.

— Omega bonita.

Jennie soltó el helado y tomó las mejillas de la alfa provocando que forme un piquito de pato.

— Tú eres mía, no de esa.

— Sí

— Sí

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² Cuidando a Kim Jisoo | Jensoo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora