Armando quería volver a ser el todo de Beatriz... O ese fue su objetivo antes de que perdiese todas sus memorias sobre ella. Tras ese giro su vida retorna a lo que era y va por algo muy ambicioso: expandir a V&M a nivel mundial.
¿Cuál es el plan? C...
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୧ *·˚
—¿Qué hay sobre la investigación, oficial? —dijo Marcela dejando su bolso sobre el escritorio.
—Debido al tiempo el equipo cibernético está teniendo más dificultades en hallar el ID host de los emails más antiguos para corroborar lo que nos brindó, los más recientes ya fueron localizados y el área coincide con la dirección que nos proporcionó, ya enviamos a un par de compañeros a inspeccionar. Asimismo, estamos realizando una búsqueda en los otros lugares para revisar los CCTV.
Una sonrisa se le asomó a Marcela, las cosas se estaban tornando en favor suyo.
》Pero, señorita Valencia, es necesario que sepa que aún no reunimos pruebas que sean lo suficientemente contundentes para aseverar que ha sido victima de acoso.
—¿Cómo..? ¡Pero lo tienen todo!, ese imbécil se la ha pasado molestándome. Estoy segura que fue culpa de él que esos videos circularan por todos lados, que por cierto, ¡yo se lo dije!, ese video es una prueba del acoso que estuve recibiendo, ¿y me está diciendo que no pueden hacer nada?
—No es que no podamos hacer nada, es solo que ninguno de esos emails nos habla sobre algo que haya atentado contra su integridad y el video muestra lo contrario; aún no tenemos pruebas lo suficientemente fuertes para detenerle.
—¿No pueden espiar su teléfono o algo así? ¿Y si se escapa? ¿Qué van a hacer si ese idiota huye?
—Intervenir un teléfono es un proceso destinado a otro tipo de acontecimientos y en dado caso que pudiéramos, usted no cuenta con el número del susodicho.
—¡Pues, búsquelo! ¡Haga algo!
Después de bufar se recargó de golpe en la silla.
Si tan solo hubiera hablado en el momento en que el peligro la había acechando, si hubiera alzado la voz, si le hubiera contado a alguien lo que estaba pasando, no solo con Ricardo si no también con Armando... ¿Cuál hubiera sido el panorama si le hubiera avisado a Betty del accidente? ¿Las lagrimas hubieran disminuido? ¿El dolor hubiera sido menos lacerante? ¿Y si hubiera aceptado que desde hace mucho lo que anhelaba lo tenía perdido?
Pero el hubiera ya no existía...
De pronto su mirada cambió a una de profunda concentración, como si las respuestas se estuviesen escribiendo ante sus ojos.
—Lo grabé —musitó ella y el oficial Scott le miró con curiosidad —Sí, sí, cuando fui a buscar a Ricardo, yo le pedí a alguien que me ayudara a buscar la ubicación, fui allá y yo, yo —susurró presurosa buscando algo en su teléfono, después de unos minutos sus facciones se relajaron —...¡Lo grabé!, escuche.
«¿Tú revisaste los sobres? Wow, no has cambiado en nada. Sigues siendo una loca insegura que le revisa las cosas a Armando.»
