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—Mitsuri...creo que me gusta Obanai...gracias a ti y a tu relación me di cuenta que realmente lo amo— Había dicho ese chico de cabello negro mientras tomaba el té con su “amiga”.
—¿En serio? ¡Woah!...yo quiero ser la madrina si se casan, yo te ayudare a conquistarlo para mí sea tuyo Tomioka— La chica había respondido muy feliz al saber que su amigo si tenía emociones.
—Por favor...eres la única persona que confío, eres como una hermana para mí... gracias— Giyuu solo miraba el té con una sonrisa.
—Por algo somos amigos...—.
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Había pasado días después de decirle a Mitsuri sobre que me gustaba Obanai, era la primera vez que sentía amor por alguien. Me sentía muy feliz porque por fin era el día después de tanto me iba a declarar hacia Obanai, Mitsuri lo había invitado a su finca para ayudarme a dar el siguiente paso.
El día era hermoso, tenía una pequeña canasta con la comida favorita de Obanai. Era el mejor día de mi vida, todo gracias a mi amiga Mitsuri. Ya había llegado a la finca, toque varias veces pero nadie contestaba así que mejor entre.
—¿Mitsuri?...— Me asome al ver que no había nadie pero se había escuchado la voz de Obanai de lejos —Oh, tal vez no me escucho...—.
Al pasar me di cuenta que los dos estaban en la habitación más grande por así decirlo, se escuchaban como risitas de alguien pero no reconocía si venía de Obanai o de Mitsuri, de seguro están chismoseando.
—Mitsuri, ya lleg-— Tire la canasta, senti como mi corazón dejo de latir pero empezo un dolor enorme en mi pecho, sentía ganas de llorar. Mitsuri estaba en el regazo de Obanai mientras tenía sus manos rodeando el cuello de Obanai, estos dos se estaban besando y lo sabía porque al parecer Mitsuri se había puesto un labial rosa —Oh, creo que interrumpí...— Intenté disimular el dolor que sentía en el pecho, Mitsuri. Mi mejor amiga que creía como mi hermana estaba con el hombre que yo amaba.
Pero ella tenía una relación, una relación con un Kakushi. Al parecer solo es una exageración mía.
—¡Oh! Tomioka, al parecer ya viste...Obanai y yo estamos saliendo— Dijo mientras se sentaba bien.
