Cinco.

333 54 123
                                    


Ohm.

Miro mi teléfono, porque Joong me ha escrito.

💬 Fue un buen primer día, tomamos un café juntos y se llevó un libro que había escogido yo, creo que es un chico difícil, pero puedo con eso.

Mis dedos se mueven sobre el teclado, mientras ladeo la cabeza.

🗨 ¿Ese es tu reporte?

Estoy pagándole bien, no voy a conformarme con la inexactitud de sus palabras.

💬 Por favor, es mi trabajo, no estés metiéndote tanto.

Desubicado.

Bloqueo la pantalla, bajando de mi auto, y veo a Jimmy en la entrada, así que le lanzo las llaves.

—Estaciona eso —le ordeno.

—Sí, señor, buenas noches —responde haciendo una reverencia.

Abre la puerta para que entre, y camino directamente a la cocina, porque huele bien.

—Mi amor —me dice apoyado en la encimera.

Le muestro el mensaje que le envié, y sonríe.

—Lo leí, siéntate.

Le avisé, no me cuesta nada hacerlo.

Le enviaba mensajes todo el tiempo antes.

Eran buenos tiempos.

Sonrío, porque ha puesto dos copas en la mesa, junto a uno de mis vinos favoritos que seguro ha sacado de nuestro bar personal.

Empiezo a creer que he olvidado alguna fecha importante, porque hay una caja pequeña frente a mí.

—¿Qué es? —le pregunto.

—Te compré algo hoy.

La abro con cuidado, adoro la manera en que me entrega los regalos, porque Nanon tiene muy buen gusto.

—Gracias —le digo cuando coloca nuestros platos en la mesa.

—Es un clásico —responde orgulloso de sí mismo.

Colecciono relojes, de verdad siempre sabe que quiero que me dé.

—Sí, yo también te compré algo, pero…

—No es nuestro aniversario, mi amor.

—¿No?

Estaba a punto de inventarme una excusa buena.

—Estaba dando algunas vueltas en el centro comercial, y pensé en ti cuando lo vi.

Estiro mi mano a los cubiertos, ha hecho mi plato favorito también.

Dicen que las personas actúan así con sus parejas, cuando se sienten culpables por algo.

—¿Y cómo te fue? —le pregunto ya con curiosidad.

—Estuvo bien, estoy redescubriendo lo mucho que disfruto de estar en la cocina.

—¿Comiste afuera?

—Almorcé en nuestro restaurante favorito, pasé por un café en la mañana, y llegué a casa a las tres.

—¿Estaba bueno?

—¿Qué?

—El café.

—Sí, supongo, era un café.

Está comiendo, no parece tener la intención de agregar algo.

¿Por qué no está contándome nada relacionado a Joong?

Suele ser comunicativo, nunca se le pasa un detalle de las cosas que hace.

¿Por qué no quiere que yo sepa?

Llevo la copa a mi boca, esperando, pero no ocurre.

Siento una presión extraña en mi pecho, cuando entiendo que no va a decirme.

Él es capaz de ocultarme que un hombre estuvo coqueteándole.

Un novio para Nanon || OhmnanonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora