Hazme el amor

04 Por no sanar antes

Capítulo 04

Por no sanar antes

Valentina no podía negarse al sentimiento tan entrañable que sentía por la castaña, ella se acercó y saludo a todas, les dio un abrazo. Era natural que también saludara a Valentina. Se acercó y la saludo. Le abrazo y dejo un beso en su mejilla, los labios de la castaña en la mejilla de la rubia provocaban mucho deseo, sensaciones y recuerdos. Juliana trataba de respetar a la rubia y se sentó al lado de Alicia.

La reunión tenía un importante objetivo para Juliana y era poder hablar con la rubia, pero no podía hacerla huir tan rápido. Las mujeres tomaban, la única que no tomaba era Valentina, echaban chistes, disfrutaban cantando rancheras. No había sido tan malo. Algunas se levantaban a bailar, otras a contestar sus teléfonos móviles, hasta que la castaña quedo sola con Valentina. Se miraron y Juliana tomo de su vaso. Se levantó e hizo que se mareo. Se sostuvo de la silla. Valentina inmediatamente se levantó.

- No estás bien. Le decía la rubia hasta acercarse a la castaña.

- No. Respondió Juliana a la rubia. Le miro a los ojos. – Desde que no sé nada de ti. Desde allí estoy muerta en vida. Valentina se cruzó de brazos. – No diré nada. Me tengo que ir. Juliana giro y dándole la espalda a Valentina se sonrió. Valentina con sus brazos cruzados, su respiración acelerada, observo el vaso medio vacío, pensó que sería peligroso que la castaña manejara así. Valentina detuvo a Juliana sosteniéndole la mano.

- No creo que sea adecuado que manejes así. Juliana se hacia la mareada. Y haciéndose la desentendida, pero el plan estaba marchando como lo planifico. Valentina jamás dejaría manejar a nadie en ese estado y menos a su Juls.

- Sí, pero no traje chofer. Sabes que nunca ando con ellos. Valentina recordaba que Juliana era privilegiada.

- Yo. Trato de decir Valentina. – Yo te llevo. Juliana debía guardar su sonrisa de victoria. Tenía que mantener su plan.

- No te tienes que molestar. No te quiero...

- Ay ya Juls. Digo Juliana. Yo te llevare, eso cambia nada entre tú y yo. Solo que. Bueno. No te dejare conducir así. Ya sabes que no me lo perdonaría.

Se despidieron y Valentina, llevo a Juliana, con cuidado hasta su auto, pero Juliana estaba muy lucida, pero todo era parte del plan.

El viaje era largo, eso también formo parte del plan. Juliana tenía que aprovechar el momento. Ese viaje de hablar.

- Val. Susurro Juliana y provocando en la rubia miles de emociones.

- Juliana ya. Solo hago esto por humanidad. No quiero hablar. Primer golpe de Valentina.

- Morrita...

- Me dañaste Juliana. No debiste. Solo sigamos nuestras vidas. Ya paso un año. Valentina detenía las palabras.

- Val déjame hablar.

- ¿Algo de lo que dirás cambia lo que paso? Valentina se detuvo en el semáforo. Miro a la castaña. Un momento de silencio.

- No. No. Yo acepto. Estaba dañada. El dolor de lo que había pasado me cegó. No es excusa.

Flashback

- Por fin conozco a la escritora en persona. Decía Juliana, sentada frente a su escritorio, viendo cara a cara a Valentina.

- Lo mismo digo. Eres más hermosa que en las fotos. Juliana sonrió. – Sonríes bonito.