Un Amor tras las Rejas {Niall y tu (Gay)} {Tercera Temporada}

Capítulo 5 - Paul y su versión tierna y sexy

Les diré lo que pasó el viernes a la noche, luego de todo el rollo de Mike, como sabemos, Paul me besó, y no fue solo eso.

Llevó su mano derecha directamente a mi trasero, y apretó este lentamente, el seguía sentado y yo raramente encima de el. Podía aspirar su aroma tan varonil y fresco, su cuerpo era mucho más grande que el mío y, había que admitir que esta MUY BUENO. Con su mano izquierda tomó el borde de mi remera negra y tiró hacia arriba, yo entendí lo que el quería hacer y lo ayudé, quitándome la remera y dejándola en el suelo, luego, metió por debajo de mis pantalones, su mano, para apretar mi trasero nuevamente pero un poco más fuerte y clavando sus uñas. Sus manos gigantes y suaves eran tan perfectas. Solté un gemido pequeño y me dejé llevar, no sentía culpa de nada, ni siquiera de Niall ¿seguíamos siendo pareja? creo que la respuesta esta en la prisión, osea, NO. Metí una de mis manos debajo de su camisa, sintiendo su perfecto abdomen y luego sentí su gran pecho, este chico me ponía bastante. Separé el beso de forma lenta, mordiendo mi labio, me aparté un poco y quité su camisa, para observar su torso completamente desnudo y casi lastimar mi labio inferior de tan fuerte que me lo estaba mordiendo.

-¿Qué pasa?- Dijo, mirándome, con una sonrisa de ganador. Luego, bajó su mirada a su pecho, y yo sacudí mi cabeza.

-N-nada, solo, es que, estas muy bueno- Dije, sonrojandome un poco, el levantó un poco los brazos y me guiñó un ojo, mostrando sus dientes blancos con su sonrisa de orgullo.

-Ya lo sabía- Levanté una ceja y golpeé su brazo.
-Cállate- Dije, suspirando.

-Ya ven- Me extendió su mano y yo la aparté, para inclinarme y comenzar a besar sus labios, posó una mano sobre mi cintura y la otra en mi mejilla izquierda, para aplastarme en su cuerpo, yo me aparté y le toqué el muslo derecho, el asintió sin separar el beso y levantó las dos piernas y las recostó sobre el sofá. Apoyé mi rodilla entre sus piernas y me acomodé para quedar sobre el, con una mano me sostenía el cuerpo y la otra se encontraba masajeando el abdomen de Paul. Luego, sentí sus manos irse a una parte de abajo, una volvió a mi trasero y la otra se dirigía al broche de sus jeans. Mordí inconscientemente su labio inferior mientras nos besábamos y el respondió con un gemido grave y un apretón sobre mi trasero.

Luego de un montón de minutos de besos apasionados, el ya se encontraba en bóxer, al igual que yo, y, era de más decir que su erección había crecido bastante. Decidí comenzar a jugar ahora, así que, me senté sobre su cadera, acomodándome para no dañarlo ni producirle ningún dolor. El puso sus manos en mi cintura, yo separé mis labios de los suyos pero dejé nuestras frentes pegadas, mi cadera comenzó a moverse de atrás hacia delante, sentí su erección rozar por todo mi trasero, y eso me puso aún más. Soltó un gemido grave y llevó una de sus manos a mi trasero para darme una nalgada algo fuerte.

-Ya quiero llegar a follarte, ____- Susurró y abrevió mi nombre de manera algo dulce.

-Deberás esperar- Dije, para sonreír traviesa-mente y llevar una mano hacia su entrepierna, levantándome un poco para dejar que mi mano tomara lo que podía y apretarla un poco. Soltó otro gemido grave y relamió sus labios.

Comencé besando su mentón masculina-mente marcado, luego, bajé a su cuello, besando este con cariño y luego haciéndole unos cuantos chupones muy marcados. Bajé a su clavícula, besando solo pocas veces esta.

Ahora me encontraba en su pecho, besé este, también pensando en dejarle unas cuantas marcas sobre el, su piel estaba muy suave y algo cálida, mordí un poco de su piel y solté una risita. El hizo una especie de gruñido y risa mezclados. 

Me salté el abdomen y finalmente llegué a su bóxer, tomé el elástico de este y levanté la mirada para ver que me estaba viendo fijo, con su labio inferior atrapado por sus dientes. Asintió vagamente con la cabeza, y bajé este, para dejar salir su erección. Me sorprendí al ver que era algo grande, escuché un suspiro salir de la boca de Paul, y atrapé la punta de su miembro con mis labios, rozando apenas estos dos. Soltó un gemido algo agudo, cosa que me pareció algo gracioso. Suspiré con mi boca a propósito para que mi aliento caliente rodeara el glande de su miembro. Lamí mi dedo índice y lo llevé al frenillo de su pene, tocando repetidas veces suaves este y escuchando los gemidos sonoros salir de su boca. Luego, con la punta de mi lengua, toqué nuevamente el frenillo, moviendo mi lengua de arriba hacia abajo para producirle un tipo de cosquillas. 
-Ya, hazlo- Gruñó llevando una mano a mi cabeza y empujando esta hacia abajo. Yo reí algo tonto y comencé a lamer el tronco de su miembro, como si fuera un helado. De abajo hacia arriba, desde el inicio hasta el glande, y obviamente desde el glande hasta el inicio.