Revelaciones en la oscuridad

0 0 0
                                    


Capítulo 10

Taehyung sintió el frío del suelo de madera bajo sus pies mientras su corazón latía con fuerza. La figura misteriosa se había desvanecido, pero sus palabras seguían resonando en su mente como un eco inquietante. “La verdad viene con un precio”. El peso de esa declaración lo llenaba de ansiedad mientras se giraba para explorar el lugar donde había estado su hermano.

Avanzando por el club de acampada…

Cada paso lo llevaba más profundo en la penumbra, y a medida que se movía, las sombras parecían danzar a su alrededor, burlándose de su confusión. Las paredes estaban cubiertas de recuerdos: fotos desgastadas, nombres garabateados en la madera y objetos olvidados que alguna vez habían tenido un significado. Pero nada de eso lo interesaba tanto como descubrir la conexión entre su hermano y este lugar.

Al llegar a una pequeña habitación al fondo, Taehyung empujó la puerta, que chirrió en protesta. Dentro, encontró un desorden de equipos de camping, sacos de dormir y cajas apiladas. Sin embargo, lo que capturó su atención fue una pequeña mesa en el rincón, cubierta de papeles amarillentos y un cuaderno desgastado.

Examinando el cuaderno…

Se acercó lentamente, sintiendo una extraña mezcla de anticipación y temor. Al abrir el cuaderno, se dio cuenta de que era un diario. La caligrafía de su hermano era inconfundible, y sus palabras resonaban con una intensidad que lo atrapaba. Las primeras páginas estaban llenas de notas sobre acampadas, risas y momentos con amigos, pero a medida que avanzaba, el tono cambió drásticamente.

“Las cosas se están complicando. No puedo confiar en nadie. Ellos están observando.” Taehyung sintió un escalofrío recorrer su espalda. Las palabras de su hermano eran un grito de advertencia que retumbaba en su mente. ¿En qué se había involucrado Seokjin?

Las páginas siguientes hablaban de encuentros extraños, de un grupo del que Seokjin parecía estar cada vez más atrapado. Las últimas entradas eran inquietantes, llenas de referencias a sombras que lo seguían, a susurros en la oscuridad. Taehyung se detuvo en una entrada particular que lo hizo temblar:

“Hoy, vi a alguien que no debería haber estado allí. Lo vi observarme desde lejos, y el miedo me consume. No sé cuánto tiempo más podré mantener esto en secreto.”

Un ruido lo interrumpió…

Justo cuando iba a pasar la página, un ruido sordo resonó en el exterior de la habitación. Taehyung contuvo el aliento, su corazón latía con fuerza. Se acercó lentamente a la puerta, intentando escuchar cualquier indicio de lo que estaba sucediendo.

—¿Hay alguien ahí? —preguntó una voz grave desde el pasillo.

Taehyung retrocedió, su mente trabajando a mil por hora. Si había alguien más, podría ser una amenaza. Se dio cuenta de que tenía que ser inteligente y sigiloso. Sin hacer ruido, volvió a cerrar el cuaderno y lo escondió detrás de un saco de dormir, decidido a regresar más tarde.

Escondiéndose detrás de la puerta…

Se quedó quieto, escuchando con atención. La voz sonó nuevamente, pero esta vez con un tono más desesperado.

—¡Por favor, déjenme entrar! ¡No puedo quedarme aquí! —era un grito angustiado, que hizo que Taehyung sintiera que su corazón se detenía.

Sin pensarlo, decidió abrir la puerta y ver quién estaba pidiendo ayuda. Al hacerlo, se encontró cara a cara con un chico de su edad, pálido y con los ojos desorbitados por el miedo.

—¿Qué sucede? —preguntó Taehyung, sin poder ocultar su sorpresa.

—¡Ellos vienen! ¡No puedo quedarme aquí! —el chico jadeaba, y su rostro mostraba una mezcla de terror y desesperación.

Invitando al chico a entrar…

Taehyung rápidamente lo hizo entrar y cerró la puerta tras de ellos.

—¿Quiénes vienen? ¿Qué está pasando? —preguntó, sintiendo que la tensión aumentaba en el aire.

—No sé exactamente, pero he visto cosas. Cosas que no deberían estar sucediendo. Seokjin estaba involucrado con un grupo, y ahora ellos están buscando a cualquiera que haya estado cerca de él. Tienes que entender que estamos en peligro —dijo el chico, su voz temblando.

El reconocimiento…

Taehyung lo miró con incredulidad. El chico parecía familiar, como si lo hubiera visto antes. Después de un momento, se dio cuenta de que era uno de los amigos de su hermano, alguien que había estado presente en sus días de felicidad. ¿Por qué no lo había reconocido antes?

—¿Tú eres…? —comenzó Taehyung.

—Soy Jimin, amigo de Seokjin —respondió el chico, y su mirada se llenó de angustia—. Necesitamos salir de aquí. No sé qué tan cerca están, pero siento que nos están rastreando.

La decisión…

Taehyung sintió una mezcla de emociones: la desesperación de la situación y la necesidad de proteger a su hermano. Sabía que no podía dejar que lo que había descubierto se quedara sin respuesta.

—Primero, cuéntame todo lo que sepas. No podemos salir de aquí sin saber qué está pasando —dijo Taehyung, decidido.

Jimin asintió, y su mirada se tornó sombría. Comenzó a hablar, y Taehyung escuchó con atención mientras la verdad se desplegaba ante él como un manto oscuro, revelando los secretos que habían estado ocultos por demasiado tiempo.

Las palabras de Jimin llenaron la habitación, y mientras hablaba de secretos y peligros, Taehyung sintió que el pasado de su hermano se entrelazaba con su propio destino. No podían escapar de lo que Seokjin había descubierto; estaban atrapados en la telaraña de su historia, y la única manera de liberarse sería enfrentando la oscuridad que acechaba en las sombras.

SINISTER INVESTIGATIONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora