Capitulo 24

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-Parece que no solo yo ha tenido un día de mierda, ¿eh? -me contesta ella con sorna--. ¿Y a ti que te pasó?... ahhhh, sí, verdad. Se me olvidó que ya te lo pregunté.

-No... ¡no! ¡No! ¡No! no pasa nada. Pues...lo que pasó ni yo lo entiendo.

.Suspiro con fuerza recordando todo lo que ha pasado. Ella se acomoda en su puesto para poder verme a la cara si girar tanto la cabeza. Respiro profundo y procedo a contarle lo que ha pasado. Todo. Absolutamente todo intentando no omitir ni un solo detalle. Vaggatha permanece atenta a todo lo que digo, además que puedo deducir que por la expresión que carga debe de saber algo de todo lo que ha pasado.

Le cuento sobre lo de Axel, de la mentira, Sol, y su obstinación más las razones por la que ha pasado todo. Al terminar de hablar ella se ríe por lo bajo dejándome sin entender la razón de fondo de su risa espontánea.

- ¿Dije algo gracioso? -le pregunto ensimismada dándole un leve toque en su hombro.

- ¡No! ¡No! ¡No! ¡Para nada!... si no que yo sabía de esto, perdón que me riera-me contesta apenada bajando un poco la mirada-. Sol me había comentado que tenía planes de volver contigo, y por otro lado Axel ya me había dicho lo suyo.

-Ahhh, entonces gracias a ellos dos, sabías más o menos sobre mí, ¿no? - le interrogo sobresaltada recibiendo de su parte una repuesta afirmativa-. ¿Por eso cuando me veías... sonreías?

-Ajá...así es-ella me mira apenada volviendo su mirada hacia arriba viendo la situación entre Luz y Valentino-. Lo mejor sería que te quedase conmigo mientras espero que esté todo para empezar el concierto. Una vez que empiece puedes quedarte detrás de la tarima.

- ¿¡Qué!?

-...solo digo-contesta simple-. Para que estés más tranquila puedes quedarte conmigo. Solo si tú quieres. Sabes muy bien que no pienso obligarte a nada.

-Sí, sí, sí. Solo dije "¿¡qué!?" por qué no me esperaba que me propusiera quedarme contigo. Y como no tengo otro lugar donde ir prefiero quedarme contigo.

Ella no me dice nada. Solo se queda contemplando a Valentino y a Luz a través de los barrotes de la plataforma. Ambos están arreglando la tarima jugando entre ellos mientras colocan sus instrumentos y esas "cosa" que sirven de soporte. Los de la agencia están con ellos poniendo también de lo suyo para ayudar al grupo. Al mismo tiempo que están arreglando todo, un chico que está prácticamente encima de nosotras con unos controles coloca música ya grabada de diferente tipo.

Volviendo la vista hacia el frente veo muchos grupos pequeños que cargan instrumentos y caminan de un lado a otro. Supongo que estos deben ser el resto de los grupos que van a tocar hasta el amanecer.

- ¿Te gusta la música?

Me volteo a ver a Vaggatha que me a preguntando si me gusta la música. La observo de los pies hasta la punta del cabello pensando bien en que decir.

-Bueno... no diría "hay como la amo" como ustedes. Pero si me gusta escuchar de vez en cuando música a través de mi celular-le contesto simple.

-Ya, ya...

-Vaggatha... ¿te puedo hacer una pregunta? - le pregunto dudosa de si es una buena idea hacerlo. Ella asiente con la cabeza haciendo contacto visual-. Sé que podrá ser un poco impertinente y... si no quieres perfectamente me dices nada, pero, ¿por qué Valentino te habló hace rato tan feo? ¿Pasó algo?

El color de su piel se puso de un color ocre mientras sus ojos se abrieron como cielo con luna llena. Parece que mi pregunta le ha caído como una patada en el estómago; está completamente estática y con un color que hace que luzca como un monolito. Me siento completamente avergonzada con ella por hacerle semejante pregunta que la he dejado como una estatua toda amarillenta.

Abro mi boca ligeramente pensando bien en que decirle para poder retractarme de lo dicho y que dejase en el olvido la pregunta formulada. Pero en el momento en el que voy a hablar, ella me interrumpe rompiendo su estado de "estasis" en el que entró:

-Pues... es algo muy incómodo que pasó, Magdalena-me contesta con un ligero gagueo en el habla-. Todo fue por una "mentirilla "en la que pensé que podría recuperar a Valentino. Y... siendo franca terminó muy mal.

-Momento... ¿Recu...?

Antes de poder terminar de hablar, ella me interrumpe para completar la palabra.

-Sí, recuperar... él... él es mi exnovio.

Con extraño escalofrío recorre todo mi cuerpo. Siento todo mi cuerpo frío sobre todo mis manos y el rostro. Vaggatha me observa con una sonrisa burlona aguantando estallar de la risa.

-Te ves como si hubiese visto un muerto, Magda-me habla con cierto tono de burla-. Él es mi ex. Cree un plan en el que... lo culpe de "algo", para así quedarme con él y tenerlo seguro a mi lado... pero incluso cuando ahora pienso en eso no tiene mucho sentido. Solo lo quería a mi lado, y lo que hice más bien fue que él me terminase odiando; y no lo culpo en lo absoluto.

-Oh... lo entiendo. Lamento que todo haya pasado de esa forma.

-Nah, no tienes de que disculparte, niña, si no tuviste nada que ver en eso. De todas formas lo que único que puedo hacer es seguir con lo del grupo y ya está. Sé que de todas formas Valentino todavía no ha conseguido manera de hacer su propio grupo aparte así que no creo que todavía se vaya, así que aprovecharé ese tiempo que queda, ¿no?

-No es mala idea-le digo murmurando.

Un fuerte silbido se escucha desde arriba de la tarima. Al asomar la mirada por encima de la tarima veo que es Valentino llamando a Vaggatha con un gesto de todo menos amistoso. Ella se levanta bufeando mientras se limpia con pequeños golpe su pantalón que estuvo en contacto con el suelo sucio.

-Bien... creo que ya está-murmura para su adentro terminando por verme de reojo sin quitar su cara seria-. Ahora me toca subir como puedes ver. Si quieres puedes quedarte aquí que al terminar la función te volveré a hacer compañía; no te dirán nada si te quedas.

-Prefiero ir a caminar, Vaggy-le contesto con una sonrisa que fue bien recibida con otra.

-Como prefieras, es lo que te parezca más cómodo para ti.

Ella se despide agitando suavemente su mano extendida a mí y se va subiendo por las escaleras. Valentino la espera con una cara larga; apenas termina de subir Val la toma del hombro y la lleva al escenario. Antes de meterse tras la cortina él se voltea como si estuviese buscando a alguien. Sus ojos conectaron con los míos, y los míos con los de él. Él relaja su semblante mientras que me da una sonrisa junto a una tierna mirada que logró que me volvieran los ánimos. Al ver que he quedado petrificada se echa a reír por lo bajo y se va al frente de la tarima.

Con las mejillas que me queman por alguna razón, termino por decidirme por irme al frente de la tarima para que los chicos me vean en primera fila, viendo que estoy ahí presenciando su función.

Obvio. Si estoy detrás ni me podrán ver ellos, ni siquiera yo.

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⏰ Última actualización: Nov 03 ⏰

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