Después de los sucesos ocurridos en la serie, el maestro Patada y su ex pupilo Manipulens regresan a su tiempo, envueltos en resentimiento y desconfianza por parte de ambos, el mayor trata de redimir a su ex alumno quien muestra estar en un dilema m...
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Unos minutos luego de que llegara a la cima del monte con la bebe Liyue, Zeng Chao mantenía el control, su tono solemne mientras le daba la custodia de la nena que dormia a uno de los soldados que lo acompañaban.
__ Veo que tuviste unos inconvenientes con la pequeña, no es asi? __Le reprende el líder tormenta a la cuidadora del emperador.
Yan Yan mira a su progenitor algo dudosa.
__ Eh..bueno yo, fui a buscarla donde la había dejado durante el torneo y pues..._murmuraba la dama.
__Ya no importa, pero tuviste mucha suerte de que la hallase yo y no tu madre__ concluye el peliazul__ ahora...alista a la bebe para el ritual, ya falta poco para que comience.
__Si, padre__Respondió la mujer de forma sumisa.
Los soldados y Mirai observaban desde un costado; esta última fruncía el ceño, claramente contrariada. pero en cuanto trató de hablar, Zeng Chao la silenció con una mirada cortante.
__ Que culpa tiene una pequeña bebe en todo esto!! es usted un malvado!!__ reprendió Mirai bajo la mirada sorprendida de los soldados.
__Disculpa??__Dijo Zeng Chao molesto por la acusación de la joven.
___ Lo que he dicho, un malvado!!. que solo busca su felicidad a costa de sus seres queridos, ni siquiera su hija quiere hacer todo esto..es inhumano por parte de alguien que decía proteger al pueblo__ contrataco Mirai.
Zeng Chao miro momentáneamente a Yan Yan nerviosa antes de enfrentar a la otra joven.
__ Si no sabes de lo que hablas, será mejor que te calles!!__Hablo fuerte el tormenta a la hija de Boshen__Si no quieres acabar muerta y sacrificada como esa bebe.
Entonces, de la nada, una neblina espesa y oscura rodeó el lugar, en medio de ella apareció una figura en forma de ave, sosteniendo algo brillante entre sus garras. Yan Yan miró la figura con sorpresa mientras Zeng Chao apenas mostraba una leve sonrisa, como si lo hubiera anticipado.
—Bienvenido, Kole —dijo Chao, su voz retumbando hacia el contrario.
Kole intentó alzar el vuelo sabiendo que no podría enfrentarse a ellos solo, pero antes de que pudiera alejarse, Zeng Chao levantó una mano y, con un gesto rápido, arrancó la piedra lunar de sus garras.
— Me agrada la gente que colabora —comentó Zeng Chao, con una frialdad que hizo eco en la atmósfera pesada del ritual. El cazarrecompensas soltó un graznido de frustración y, de un giro repentino, desapareció en la neblina, aprovechando la distracción.
__ Mi señor!!__Dijo uno de los soldados bajo el mando tormenta__Ese cambiaformas ha huido..lo perseguimos??
__ No...__respondio el lider viendo el ave volar__Se que volvera en menos de lo que esperas__
