epílogo 2

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Maridos con Beneficios


CHANYEOL


Desde primeras citas, pasando por ser mi primer novio, hasta la primera noche de SeHun después de mudarse, hubo muchas primicias.

Nuestra primera pelea, que se trató más bien de que yo necesitaba sacarme la cabeza del culo. Disculparme y admitir que me equivoqué fue una mierda, pero la parte de reconciliación fue divertida.

O la primera vez que Enzo se enfermó y lo llevamos rápidamente al veterinario. No era nada que algunos antibióticos no solucionaran, pero daba muchísimo miedo y nunca había necesitado más a SeHun en mi vida. Él era una auténtica roca de apoyo, sensato y perfecto, mientras que yo era nada menos que un desastre. Aunque en realidad, eso nos resumía un poco.

Y luego llegó mi primer día en un nuevo trabajo.

Fue con una gran empresa de tecnología y su misión de poner a las personas en primer lugar me pareció adecuada. Nunca había tenido que hacer una entrevista para un trabajo, y fue desalentador y nauseabundo, pero también emocionante. Tenía una licenciatura, una larga y variada experiencia en análisis de datos, evaluación de riesgos y gestión de recursos, y una sólida trayectoria laboral y una excelente cartera. Era cierto que ese historial laboral era en una empresa familiar, pero era a nivel nacional. Yo era capaz y estaba dispuesto, y con el apoyo inquebrantable de SeHun, también creía en mí mismo.

Él estaba más nervioso que yo y caminaba de un lado a otro cuando regresé de la entrevista.

—¿Come te fue?

Mi sonrisa le dijo todo lo que necesitaba saber, y me rodeó con sus brazos y me levantó.

—¡Estoy tan orgulloso de ti!

Yo también estaba orgulloso de mí.

Y así comenzó mi incursión en el mundo de la Industria Tecnológica. Trabajaba muchas horas, no más de lo que estaba acostumbrado, de lunes a viernes, y pagaban muy bien. También fue una prueba para mi padre de que podía arreglármelas solo. Había hablado con él exactamente tres veces en el último año. Así que en realidad no era muy diferente a cómo eran las cosas antes, aunque ahora no teníamos el colchón de trabajo para suavizar la cruda realidad de nuestra relación.

Y yo estaba bien con eso.

SeHun todavía estaba en el mismo trabajo. Había habido algunos cambios estructurales y técnicamente todavía estaba bajo la empresa matriz de Park Corp, pero su división de construcción ahora era una rama aparte del árbol de mierda. Estaba más feliz con eso, y la verdad es que había trabajado duro para llegar a donde estaba.

Merecía quedarse.

Además, trabajaba con sus compañeros, los viajes eran mínimos y la paga era buena, aunque nunca volvió a asistir a otra reunión de encargados el lunes por la mañana.

¿Y yo?

Estaba mucho más feliz. Ni siquiera sabía lo que era la verdadera felicidad hasta que dejé de trabajar para mi padre. Claro, SeHun me mostró lo que era la felicidad, pero esto era diferente.

Esto era libertad y autoestima. Estaba seguro de que SeHun tenía mucho que ver con eso y probablemente nunca habría tenido el coraje de hacer la mitad de lo que hice sin él.

Estaba fuera de la sombra de mi padre, disfrutando de la luz del sol por primera vez. Me reía más. Salía más. Era libre. Era libre de ser mi verdadero yo por primera vez en mi vida. Todavía practicaba Karate los lunes por la noche, seguía jugando al rugby y seguía dando lo mejor que tenía. Había sido un camino sinuoso para encontrar mi verdadero yo, cada paso un hito.

𝐄.𝐂.𝐁 || 𝒔𝒆𝒚𝒆𝒐𝒍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora