Después de vestirse y conseguir bajar las escaleras, llega directo a su comedor, dónde encuentra varios platos sucios sobre la mesa, algunos cubiertos y un líquido café, casi negro de dudosa procedencia derramado sobre el mantel.
En la sala observa algunas cobijas y un recipiente grande con algunos maíces de palomitas.
¿Tanto desastre pueden causar solo 3 adolescentes?Decide sentarse y al hacerlo, su pierna izquierda dolió más que la derecha.
Un leve quejido salió.
“¿Pues qué pasó anoche?” pensó en voz alta.Observó la cobija que tenía a un lado y trató de recapitular en orden los sucesos de unas horas atrás.
…
—Les propongo ver algo del universo de Marvel.— la voz de la chica sonó.
—¿Otra cosa no propones?— el peliblanco habló y después se dirigió a su mejor amigo. —Suguru ¿Que sería algo bueno para ver?
—El señor de los anillos.
—Uh… que aburrido suena.— La castaña cruzó los brazos.
—Shoko, creo que es momento de culturizarte un poquito. Vamos a ver el señor de los anillos y como toda buena fan, te vas a enamorar de Legolas.— Satoru veia fijamente a su amiga.
—No, no veré nada.
Y después de ese “No veré nada”...
—¡Ya pongan la película dos!— Ieiri abrazaba una almohada mientras volteaba a ver a sus mejores amigos.
—Je, que irónico después de decir que sonaba aburrido.— habló el peliblanco.
Tras poner la película, los tres se quedaron viendo fijamente a la televisión.
Shoko no podia estar más emocionada al ver al elfo peliblanco de ojos morados lanzando flechas.
A mitad de la película, Suguru sintió un peso en su hombro.
—Uy, no aguanta nada.— se escuchó la voz de la fémina.
—Tu a lo tuyo, yo a lo mio.— Abrazó al peliblanco.
—Anda Suguru, ya dile que te gusta.— La chica puso pausa al televisor.
—Me va a decir que no.
—Pero si serás estúpido, le gustas.
—No tengo forma de creer en tus palabras.
—A ver, recapitulemos todo lo que ha pasado.— empuña su mano. —Uno.— levanta su dedo índice. —Fingen ser novios.
—Sí, pero él empezó.
—Por eso, si él empezó fue por algo.
—A mi me dijo que fue para darte el gusto.
—Si, como digas. Dos.— Levantó su dedo corazón sin bajar el índice.—Se dejó follar, ¿has pensado el por qué?
—Seguro es porqué estaba caliente.
—¡Ay, es el colmo contigo!
—¿Ahora por qué?
—Bueno, si yo estuviera como maldito horno no creo que me agrade la idea de que una mujer me meta los dedos; supongo que si Gojo se dejó es porque siente algo por ti, si no, fácil hubiera sido que fuera por una perra que esté detrás de él. Sabes bien que pretendientes y amantes no le faltan y cualquiera estaría agradecida si él hace que pierdan lo último de inocencia y virginidad que tienen.— Su tono marcaba su frustración y enojo, al igual que su lenguaje corporal y expresiones faciales.
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★El álbum de fotos (SatoSugu/SuguSato) ★
RomanceSatoru Gojo y Suguru Geto son amigos, ambos están enamorados uno del otro pero no lo saben. ¿Llegarán a ser novios en algún momento o solo será un deseo con el que ambos se quedarán? Su buena amiga Shoko tal vez pueda aportar (estoy cayendo en la lo...