¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Corrieron y el primer contacto que tuvieron con el exterior fue la arena del desierto bajo sus pies, sin importarles que los siguieran por detrás no dejaron de correr, sus cuerpos dolían y ardían tras luchar contra el viento, pero aun así no se detuvieron. Subieron las montañas y al mirar para atrás observaron cómo los guardias salían con cuatriciclos y las linternas para buscarlos.
-¡Rápido corran! - grito Thomas – ¡los perderemos en la tormenta!
Tal y como lo había dicho Thomas se acercaba una tormenta de viento y arena, y al ser de noche pasarían desapercibidos, pero debían encontrar un refugio donde esconderse. Al subir una de las montañas se tiraron al piso mirando como los guardias se esparcían por todas partes y algunos intentaban subir la montaña en donde ellos se encontraban.
- ¡Avancen, avancen! - grito Ofelia junto a Thomas al ver como lograban de apoco subir la montaña. Teresa en un intento de que no los atrapen empezo a correr mucho más rápido que los demás tomando ventaja.
- ¡Teresa no te separes! - gritaba Thomas detrás mientras se cubría los ojos al igual que el grupo, era tanta la arena que no podían ver nada y el viento no ayudaba.
Cuando lograron llegar a su lado, encontraron una especie de refugio bajo la arena, era un edificio en ruinas,lo que veían era pequeñas ventanas una al lado de las otras lo cual hacía de techo, Teresa al ver una de estas ventanas rotas se adentró obligando al grupo a seguirla.
- ¡Espera!
- ¡Teresa!
- ¡Mierda, Teresa! - grito Ofelia siendo la primera en seguirla adentrándose junto a la peli negra. Bajaban por una colina de arena, deslizándose. Una vez abajo esperaron a que todo el grupo bajase. Si querían salir por donde entraron iba a ser imposible ya que estaba la colina de arena.
- ¿Qué es este lugar? - pregunto Minho alumbrando con la linterna a su alrededor.
- Hay que irnos... hay que seguir caminando - dijo Thomas al tener un mal presentimiento del lugar, estaba todo oscuro, no era seguro, el grupo empezó a seguirlo
- Thomas tiene razón - concordó a Alessa
- No... - dijo teresa al ver como todos empezaban a caminar - ¡Thomas, espera! - al escucharla todos se dieron vuelta – dime que fue lo que ocurrió...
- Es CRUEL – le contesto acercándose a ella- CRUEL nos engañó jamás escapamos, vimos algunos cuerpos Teresa... eran demasiados
- ¿De qué hablas? - preguntó Minho a su lado - ¿cadáveres?
- No, pero no estaban vivos... estaban colgados – hizo un gesto con la mano esperando que lo entiendan – llenos de tubos, los estaban... los estaban drenando. CRUEL quiere algo que tenemos dentro...
- Nuestra sangre – dijo Ofelia acercándose a la ronda que se había formado – somos distintos... noso-
- ¿Y tú cómo lo sabes? - preguntó el rubio desconfiado
