Capítulo 46 | Descontrolado

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—Ashi, iré a buscar mi cereal con pasas. Tú ve por los vegetales, por favor —El mencionado solo asintió y Caleb se dirigió al pasillo para tomar lo que quiere. Miró los diferentes tipos de cereal, pero a pesar de eso, siempre termina tomando su favorito sin cambiarlo.

Sonrió un poco y se fue a buscar algunos dulces por mientras, tomó algunas gomitas y se fue con su Ashi, el cual estaba eligiendo los vegetales tal como le pidió, pero también, estaba platicando con un chico. Caleb sintió las ganas de correr y cortarle el cuello para que todos vean lo que es capaz de hacer si tan solo se acercan a él. No reaccionó en el momento, primero porque estaba pensando qué hacer.

Terminó tomando una bocanada de aire y se fue acercando, colocando todo en el carrito. Asher lo observó un poco y tragó con dificultad, puesto que el chico fue el que se le acercó y empezó a sacarle conversación. Sin embargo, lo vio más que tranquilo y eso lo inquietaba más. ¿Su osito sin decir nada al respecto? Por favor, eso ni siquiera es posible. ¿Por qué no dice nada? ¿Tan enojado está que no quiere hablar con él?

Lo observó metiendo cosas en el carrito mientras que mantiene una leve sonrisa en su rostro que más que gustarle tiene que admitir que le genera algo de miedo.

—Osito, ¿Estás bien?

—¿Por qué no lo estaría, Ashi? ¿Tienes algo de lo que te arrepientas? —Bueno, esas palabras no ayudaron en nada a qué se sienta mejor. Sí, en definitiva le pasa algo —¿Llevamos esto? Es que quiero prepararte algo diferente esta noche.

—Mejor pedimos comida.

—No. Dije que quiero prepararte algo diferente esta noche, Ashi. Ya hay que pagar —Caleb se veía más que tranquilo, no parecía que algo lo estuviera afectando.

Sabe que su hermano está inquieto y que odia no saber qué pasa, pero solo está intentando mantener la calma para no hacer un drama por todo. Tal vez en el fondo quería gritar y matar a todos. Aunque, solo fue una conversación sin importancia, ¿Cierto? Quiere creer en eso fielmente.

—¡Oye! —Ambos voltearon sus rostros viendo al mismo chico —Este es mi número por si te interesa llamarme, y ya sabes, salir alguna vez —Caleb alzó ambas cejas y le dio una mirada a su hermano, puesto que se sintió un poco sorprendido por la situación. Mantener la cabeza la verdad que se está haciendo cada vez más complicado.

Asher se quedó estático solo viendo al chico, puesto que ya sabía lo que venía después. Negó con una sonrisa y trató de ignorarlo, pero no estaba funcionando porque el chico siguió insistiendo y la verdad, es que ya Caleb estaba perdiendo el control que estaba teniendo para no hacer un drama.

—Por favor, es que me gustaría volver a platicar contigo. Además, eres un hombre muy guapo que atrapó mi atención.

—Bueno gracias —Caleb achicó sus ojos al escuchar a Asher decirle gracias. ¿Cómo que gracias? ¿A qué se refiere con ese maldito gracias? —. Sí, tal vez te llame.

—De acuerdo.

¿Qué acaba de escuchar? Volteó a verlo como la niña del exorcista, listo para romperle la puta cara. Asher estaba sonriendo un poco, misma sonrisa que se esfumó de golpe al ver a su osito. Sí, su corazón se aceleró de sobremanera y hasta se sintió en peligro por él.

—¿Qué acabas de decir, Asher Clark?

—Yo... Pu-pues... Es que... No quise ser descortés.

—¿Y yo estoy pintado en la maldita pared o qué?

—Osito...

—¡Cállate! —Se sacó el arma y comenzó a caminar con rapidez mientras que Asher comenzó a seguirlo.

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