El departamento de Sofía Calderón estaba sumido en penumbra. Las cortinas gruesas, tiradas sobre las ventanas, bloqueaban la luz del sol, dejando la habitación en una oscuridad abrumadora que parecía abrazar cada rincón. Sofía, recostada en el suelo con la espalda contra el frío de la pared, se sentía como un fantasma atrapado entre su propia vida y una tristeza que parecía no tener fin. Su cabello oscuro, enredado y despeinado, caía sobre su rostro, ocultando sus ojos hinchados, prueba de lágrimas que no parecían tener final.A su alrededor había un rastro de noches largas y vacías: colillas de cigarrillos desperdigadas por el suelo, latas de cerveza aplastadas y botellas vacías de vino esparcidas por la alfombra. Parecía que la habitación se había convertido en un reflejo de su propio estado: un caos silencioso, una escena de abandono absoluto. En su mano, sostenía una colilla, ya apagada, que no había terminado de fumar, y su mente vagaba entre los errores de su pasado y el dolor de su presente.
Sofía se sentía atrapada en un vacío del que no podía escapar, como si su carrera, una vez brillante y prometedora, se hubiera desvanecido en una nube de humo y malos recuerdos. Se repetía a sí misma que este escándalo, el último en una serie de errores y malas decisiones, había sido el final de todo lo que alguna vez construyó. Su nombre, su música, su imagen, todo parecía destrozado, y la prensa se encargaba de recordárselo cada día con titulares despiadados y rumores que no dejaban de multiplicarse.
La puerta de su departamento se abrió con un golpe seco. Sofía ni siquiera levantó la mirada; ya sabía quién era.
—¿Qué demonios pasó aquí, Sofía?— La voz firme de Paula, su manager, retumbó en la estancia, llena de una mezcla de incredulidad y desesperación.
Sofía escuchó sus pasos acercarse mientras Paula esquivaba las latas y botellas en el suelo. Paula tenía una presencia imponente, su cabello rubio recogido en un moño perfectamente ordenado, y vestía un traje oscuro que la hacía ver aún más profesional y severa.
—¿Vas a decirme que llevas días sin salir de este lugar? ¡Mira este desastre!—Paula exclamó, señalando el caos alrededor. Sofía apenas se dignó a alzar la vista hacia ella.
—No estoy de ánimo para sermones, Paula—respondió Sofía en voz baja, sin fuerza alguna.
Paula soltó un suspiro, claramente intentando mantener la calma. —No es solo un sermón, Sofía. Tu carrera está colgando de un hilo, ¿entiendes? Cada día que pasas aquí, hundiéndote en la oscuridad, es un día más en el que los medios destrozan tu imagen.
—¿Y qué importa ya? Mi imagen está destrozada. Todos creen que soy... un desastre. Una farsa.—Sofía apretó los dientes y lanzó la colilla al suelo con desdén.
Paula cerró los ojos, como intentando reunir paciencia. —Escúchame, esta no es la forma de salir adelante. Sé que estás pasando por un momento difícil, pero no puedes seguir así. Tienes que mostrarle al mundo que eres fuerte, que puedes recuperarte.
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𝐸𝒸𝑜𝓈 𝒹𝑒 𝒻𝒶𝓂𝒶 (Nicholas Chávez)
Разное‧₊˚🖇️✩ ₊˚🎧⊹♡ En Ecos de Fama, Nicholas Alexander Chávez y Sofía Calderón, una reconocida cantante y actriz, están atrapados en una relación de conveniencia para limpiar sus reputaciones y recuperar su lugar en la cima. Nicholas, en busca de redimi...