Lilían Pérez es mucho más que solo la hija de un famoso piloto de Fórmula 1. En 2024, mientras Checo, su padre continúa conquistando circuitos, Lilían intenta abrirse paso en un mundo que aplaude su apellido pero pone a prueba su propia identidad. A...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Chapter five. Narrator
❝Tocarte todo❞
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El Gran Premio de Estados Unidos había comenzado con la práctica del día viernes, pero ese día Lilían no asistió al paddock porque tenía dolor de cabeza.
-¿Por qué no vino Lilían? -le preguntó Carlos a Checo mientras caminaban juntos.
-Le dolía la cabeza y prefirió descansar -respondió Checo.
-Ya veo... Tiene dos semanas que regresó a la Fórmula 1 y es como si nunca se hubiera ido. Lilí es una chica muy buena -dijo Carlos, y Checo lo miró-. En verdad, tiene un carisma único; Rebecca la ama.
-Sí, todo mundo la ama -sonrió Checo.
-Espero que mañana sí pueda venir.
-Espero que sí.
-¿Viste el video que mandó George al grupo?
-¿Video? ¿Qué video? -preguntó el mexicano, frunciendo el ceño, curioso.
-¡Mira esto! -exclamó Carlos mientras se reía. El video mostraba a Lilían y Franco riéndose y charlando detrás del garaje de Red Bull. Franco estaba contando una broma y Lilían apenas podía contener la risa.
-¿Qué hacen los dos solos? -dijo Checo con un tono serio.
-Vamos, Checo. Solo son amigos. Están disfrutando un buen momento.
-Sí, pero en este entorno, las cosas pueden malinterpretarse fácilmente. No quiero que Lil se vea involucrada en chismes innecesarios -respondió Checo, manteniendo su mirada en el video.
-Es solo un video -Carlos encogió los hombros-. Ese video no saldrá a la luz; George solo lo mandó al grupo y de ahí no saldrá. Además, se ve que Colapinto la hace reír; es el chico que más o menos está de su edad, por eso se llevan bien.
-¿Más o menos de su edad? -alzó la voz-. Colapinto tiene 21 años y Lilían tiene 18. La diferencia es notoria.
-¿Y cuántos años tienes tú y cuántos tiene Carola? -le preguntó Carlos, pero no obtuvo respuesta-. Ves, solo déjala divertirse. Solo es un juego entre ellos... creo.
