Garime "El camino de las estrellas"

Cap. 1 El Camino De Las Estrellas

La primera semana en La Casa de los Famosos había sido una montaña rusa para Gala Montes. Todo en ese lugar era diferente, los rostros nuevos, las cámaras constantes, y la presión de ser alguien que todos observaban. Desde el primer momento, había sentido una tensión extraña con Karime Pindter. Aunque intentó ser cordial, algo en el comportamiento de Karime la incomodaba. Quizás era su actitud desinhibida o el hecho de que, en todo momento, parecía estar en la defensiva.

El día de la nominación había llegado. Gala observaba cómo Karime, con una sonrisa algo forzada, pronunciaba su nombre. No esperaba esa nominación de ella. De hecho, fue como un golpe directo al corazón, una señal de que, quizás, nunca encontrarían un terreno común.

"¿Por qué yo?" pensó Gala, mientras veía cómo Karime se alejaba después de su declaración. Las palabras de Karime la habían dejado fría, pero lo peor de todo era que algo en su interior la hacía sentirse perdida en medio de esa guerra de personalidades.

Pasaron los días y la tensión entre ellas era palpable. Gala evitaba a Karime siempre que podía, y Karime parecía mantener su distancia, aunque con la mirada fija en Gala cada vez que pasaban cerca. Las discusiones en la casa aumentaban, y las alianzas comenzaban a formarse de manera inesperada.

Una tarde, después de una pelea con otro miembro del grupo, Karime se acercó a Gala. El ambiente estaba cargado, y las palabras salieron de su boca con dificultad.

—Sé que te dolió lo que hice. No pensé que lo tomarías así, de verdad… —dijo Karime, evitando la mirada de Gala, algo inusual en ella.

Gala la miró, sorprendida por la sinceridad en su voz. Durante todo ese tiempo, había percibido a Karime como alguien indestructible, alguien que no necesitaba disculparse por nada. Pero allí estaba, con una vulnerabilidad que Gala no esperaba.

—No me gustó, sí —respondió Gala, manteniendo la calma. —Pero entiendo que esto es un juego, y no siempre se hacen las mejores decisiones bajo presión.

Karime levantó la cabeza, sus ojos se encontraron con los de Gala, y por primera vez, algo en la mirada de ambas cambió. Había una comprensión que no existía antes, una especie de puente que comenzaba a formarse.

—Quiero hacer las cosas bien entre nosotras. Si me das una oportunidad, prometo que no te fallaré. —La voz de Karime era más suave, sincera.

Gala, después de un momento de reflexión, asintió con la cabeza. No iba a seguir guardando rencor. A veces, las personas se equivocan. Lo importante es saber aprender de esos errores.

Desde ese día, algo comenzó a transformarse entre ellas. Las conversaciones se volvieron más largas, más profundas. Se descubrieron mutuamente detrás de las cámaras, alejadas de la competitividad y las cámaras del reality.

Una noche, cuando todos en la casa estaban dormidos, Gala y Karime se encontraron solas en la terraza. El aire fresco de la madrugada las rodeaba, y Karime se acercó lentamente.

—No pensé que terminaríamos así —dijo Karime, mirando a Gala con una mezcla de admiración y curiosidad.

—Yo tampoco —respondió Gala, sonriendo por primera vez en mucho tiempo. —Pero esto no es tan malo.

Karime dio un paso más cerca, su respiración tranquila pero acelerada. Por un segundo, ambas se miraron en silencio. No hacía falta nada más. La tensión entre ellas ya no era de pelea, sino de una atracción palpable que crecía sin que pudieran controlarlo.

—¿Sabes? A veces creo que las cosas más inesperadas son las que valen la pena —dijo Karime, con un tono bajo y lleno de significado.

Gala no pudo evitar sonreír. En ese momento, todo lo que había pasado se desvaneció. Lo que había comenzado con desconfianza y enojo, se había transformado en una conexión que ninguna de las dos podría ignorar.

—Creo que tienes razón —respondió Gala, antes de que sus labios se encontraran en un beso suave, cargado de promesas y de todo lo que aún quedaba por descubrir.

Esa noche, en la Casa de los Famosos, no solo empezó una nueva relación, sino también un capítulo inesperado que las unió más allá de las cámaras.